Turner se lesionó en el primer cuarto. Sintió un escozor, pero prefirió no decir nada y siguió jugando. Pasó al banquillo y se enfrió, en su regreso a la cancha, al inicio del segundo cuarto, en un drive hacia canasta se descompuso definitivamente. “Esa lesión es una contractura anormal del músculo. Se sitúa en la zona posterior del muslo, en la parte distal del muslo, cerca de la rodilla”, señala el médico del club, Benito Ramos.
En los próximos días se someterá a una ecografía y una resonancia magnética para aclarar aún más la lesión, pero una cosa está clara.: “Es una lesión de larga duración”. Y el médico añade: “No sabemos si estará dos meses o uno de baja, pero será mucho tiempo porque no podemos forzar nada con una lesión así. El jugador podrá empezar a entrenar en unas semanas, pero no va a jugar”. Va más allá: “Hay otras lesiones, como un esguince de tobillo, que se pueden apretar más o menos y hay jugadores que toleran más el dolor. Esta lesión es otra cosa, Turner no puede ni subir una escalera aunque quiera. Tienes que ser paciente”.
Sin previsión definitiva, pero los cálculos que maneja el club y sus servicios médicos son que, en el mejor de los casos, Turner podría regresar a los campos el próximo 9 de diciembre. contra Melilla en el Pazo. Eso significaría perderse los próximos ocho partidos de liga.