“Discreción.” Es la palabra más repetida entre los ministros socialistas. Ley del silencio. Ni una palabra más. No queremos el más mínimo riesgo que haga descarrilar la negociación con los independentistas catalanes de ERC y Junts. Sólo unas pocas personas del núcleo duro de Pedro Sánchez manejan información. Ante este escenario incierto, Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha y único socialista con mayoría absoluta, alza la voz de manera sostenida, manteniendo una postura contraria a la negociación con los nacionalistas.
“Sé lo que pide Puigdemont y sé que es intolerable”, ha declarado este martes el presidente regional. Este periódico ha publicado que el líder independentista prófugo de la Justicia exige la incorporación del “reconocimiento de Cataluña como nación” en el acuerdo político que está negociando con el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. Sobre esta negociación, de la que se muestra disconforme, Page sostiene que lo que se acabe pactando “depende del grado de tolerancia que tengan los negociadores”.
El pacto entre el PSOE y Junts encalla por esta exigencia del reconocimiento de Cataluña como “nación”, algo que no es aceptado, al menos a día de hoy, por el bando socialista. “Todos sabemos que la parte difícil (de la negociación) está en Puigdemont. Mi tesis es que no quiero que España esté esperando un mando a distancia de Waterloo y que en este país nos hagan bailar a todos una sardana política”.
PSOE y Sumar han sellado un acuerdo de gobierno, con el que Page está de acuerdo -lo ve “positivo” y coincide en que hay una España “más social, más sostenible, más verde y más feliz”-, pero como reconocen los propios negociadores socialistas, esta hoja de ruta está sujeto al pacto de amnistía.
“La amnistía favorece un acuerdo global que permita a todos poder, a través de la palabra, a través del diálogo, a través de medidas consensuadas, poder seguir avanzando en el mejor encaje de Cataluña en España”, explicó María Jesús. Montero, ministro de Hacienda en funciones y uno de los negociadores socialistas, en una entrevista en Ser.
“Cuando se habla de amnistía hay que tener muy claro que una Constitución que es capaz de regular el indulto, que es menos, deja fuera la amnistía, que es mucho más, y sería mucho más lógico que se incluyera en “La Constitución. Y no es, simplemente, porque se debatió si debía ser contemplada o no y fue descartada en los debates constitucionales”, replicó Page.
Durante su conferencia inaugural en la jornada ‘Castilla-La Mancha hacia el futuro’ organizada por Europa Press, el líder regional atacó a los independentistas, aquellos que quieren “reinterpretar su pasado y el de los demás, un pasado que no fue tal”. “a partir del cual se quiere establecer un imaginario de derechos adquiridos”; a quien ha advertido que si su Comunidad Autónoma tiene que “parar trenes” y exhibir el pasado, lo hará.