El procedimiento para salir del balneario y satisfacer la deuda que tiene con sus acreedores carece de puja mínima. La cantidad que reclaman los acreedores -y que, en principio, el deudor debe asumir incluso después de la adjudicación- supera los 165.000 euroscantidad que se pretende liquidar mediante la venta de la unidad productiva.
Con un valor de subasta de 1,4 millones de euross, los postores interesados deberán pagar un depósito de 70.000 euros para enviar sus ofertas. El tramo entre ofertas es de 28.000 eurostú; Es decir, sólo podrán mejorar sus ofertas en esa cantidad, o en múltiplos de esa cantidad. Finaliza el plazo para ofertar por la unidad productiva del balneario el próximo lunes 6 de noviembre a las seis de la tardesegún la información disponible en el Portal de Subastas.
El balneario entró en quiebra hace casi un año y cerró en marzo. Varias empresas se mostraron interesadas en hacerse cargo de las instalaciones termales tras conocer su venta, que viene acompañada de una remodelación para reiniciar el uso térmico.
Siglo y medio de historia, en situación de insolvencia
El hotel balneario Baños de Molgas entró en funcionamiento en 1873. Fue por esa época cuando se construyó el edificio actual, situado a orillas del río Arnoia y junto al puente medieval de la localidad. Sin embargo, diversas intervenciones para mejorar el manantial revelaron objetos que datan de la época romana. De hecho, la propia historia del pueblo de Baños de Molgas está ligada a unas aguas termales que los romanos ya conocían y aprovechaban.
El spa, que también es hotel, Tiene casi 30 habitaciones. que suman una capacidad para unos 50 invitados. Es obra del arquitecto ourensano Manuel Conde Fidalgo. Su rica historia no fue suficiente para evitar la quiebra: la falta de beneficios obligó al establecimiento a colgar el cartel de cerrado en marzo de este año.