Una de las primeras medidas adoptadas por el nuevo gobierno de la Generalitat Valenciana, presidido por el popular Carlos Mazón, ha sido incrementar la bonificaciones de hasta el 99% al impuesto sobre sucesiones, en los casos de herederos forzosos o directos, es decir, hijos, padres, cónyuge y nietos.
Con ello se ha conseguido una gran mejora para las familias, principalmente de clase media, en el tratamiento fiscal de este impuesto, pero no su eliminación, como se ha afirmado retóricamente.
Todavía hay beneficiarios de herencias que tienen que lidiar con tasas altas, que en nuestro territorio autonómico, puede seguir llegando al 81,6%. Estos son los pertenecientes a los grupos denominados III (hermanos, sobrinos, tíos), y IV (parejas de hecho, vecinos, conocidos). Esta situación tiene que cambiar, tal y como lo ha hecho la sociedad española.
Cabe recordar que el Derecho de Sucesiones en la Comunidad Valenciana se basa en el Código Civil que data de 1889. 134 años de diferencia en una sociedad que ha desarrollado grandes cambios, tanto en el concepto de unidad familiar como en los vínculos matrimoniales y sociales, así como en las parejas sin descendencia. De esta forma, cada día son más los herederos nombrados en el testamento que forman parte de los grupos III y IV, sin ningún tipo de crédito fiscal, sino que por el contrario mantienen un coeficiente multiplicador que puede llegar al 2,4. veces más que la tarifa completa aplicable a un niño.
Debido a nuevos modelos familiares que van tomando forma con el paso del tiempo, así como el aumento de la esperanza de vida y el aumento de la demanda para flexibilizar derechos legítimos o eliminarlos, la sociedad viene reclamando que se revise el derecho sucesorio y su tratamiento fiscal.
Y ante esto, los partidos políticos, especialmente aquellos con bases liberales y socialdemócratas, deberían adaptarse e implementar cambios en el sistema legal para enterrar definitivamente los impuestos sobre la muerte.
En ese sentido, las Islas Canarias ya han aprobado la bonificación máxima para hermanos, sobrinos y tíos, Murcia en breve y Madrid planea hacerlo este término. En la comunidad valenciana, esperamos que el gobierno del generalitat también lo haga, por menos del 50% como prometió el Partido Popular en su programa electoral fiscal.
Sin embargo, el gran cambio debe producirse a nivel nacional con la eliminación de la Ley del Impuesto sobre Sucesiones y la modificación de la Ley de Régimen de Financiación de las Haciendas Locales para eliminar la mortis causa como hecho imponible para recaudar ganancias patrimoniales, de modo que el tratamiento fiscal de muerte se detiene dependiendo del color del partido político que gane las elecciones.
Antonio Garañena Cubes es presidente de la Asociación Contra el Impuesto de Sucesiones en la Comunidad Valenciana
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