Querida Lina, fue un placer haberte conocido, abrir las puertas a esta gente de la “Ribeira Sacra”, que le abriría las puertas no solo de su casa, sino de su corazón y el de su familia. Fue un placer haber compartido mesa contigo, haber conversado, haberte abrazado y haber sentido esos besos de abuela que hacía tantos años que no sentía.
Mujer luchadora, gran madre, suegra, abuela y vecina…gracias por tanto y por todo,gracias por lo que nos enseñaste en este corto lapso de tiempo,gracias por lo que nos dejas,tu gran familia,gracias por dejarnos ser testigos del amor de tu esposo y tú.
Querido Juan, ya la tiene a su lado, No soportó su partida y se desvaneció hasta que también se llevó esa maleta e iniciar un largo viaje, seguro que él la estaría esperando. Ahora vuela alto, tomados de la mano, cálmate, los tuyos están sufriendo ahora, llorando su pérdida, pero en la medida de lo posible, los cuidaremos, sabemos que tú también lo harás.
No hacen falta muchas palabras, estas son pocas pero llena de amor, cariño y respetola que nos transmitió desde el primer momento que la conocimos.
Hoy en el cielo brilla una nueva estrella que iluminará con intensidad las calles de Laza, hoy el cielo está de fiesta.
Gracias Lina, buen viaje.