Como “una tontería increíble”. Así califica la Asociación de Amigos de la Casa Panero la decisión del Ayuntamiento de Astorga, gobernado por el PP, de programar una ‘Casa del Terror’ para la celebración de Halloween en el Museo-Casa Panero habilitado hace unos años en cual era la casa que Allí vivió Leopoldo Panero (Astorga, León, 17 de octubre de 1909 – Castrillo de las Piedras, León, 27 de agosto de 1962), poeta de la Generación del 36.
«Roza la provocación y el ridículo»subraya el escrito, firmado por unas doscientas firmas, incluido el de la propia familia Panero. Cargan contra elconversión caprichosa de un espacio concebido para el disfrute de la cultura en un espacio de celebraciones lúdico-recreativas, completamente ajeno al espíritu y propósitos que animaron la creación de este Museo.”
La denuncia llega después de que el Ayuntamiento de Astorga, localidad leonesa de unos 11.000 habitantes, haya incluido en su programa de celebración de Halloween habilitar la Casa-Museo Panero -de titularidad municipal- en la Casa del Terror. Es, de hecho, la actividad destacada del programa, que también prevé un ‘escape room’ familiar en el mismo espacio entre el 28 de octubre y el 1 de noviembre. Con “plazas limitadas”, según el cartel publicitario, está previsto para este sábado 28 de octubre a partir de las 6:00 p.m. y hasta las 20.00 horas, con la recomendación de tener al menos siete años, con entrada cada diez minutos en grupos de entre cuatro y cinco niños.
“Queremos que la gente disfrute de las instalaciones públicas como este edificio, un gran castillo desconocido que tenemos que empezar a disfrutar”, afirmó el concejal de fiestas, Borja González, en la presentación del programa.
Pero desde la Asociación Amigos de Casa Panero no comparten este propósito, por lo que, defienden, Los objetivos con los que se creó este espacio museístico fueron “mostrar” a los vecinos de Astorga y visitantes “el legado de valor incalculable que dejaron en la ciudad algunos de sus hijos más ilustres«. Es el caso, citan, de Ricardo Gullón, académico de la Real Academia Española y Premio Príncipe de Asturias; Luis Alonso Luengo y José María Luengo, historiadores y etnógrafos; Evaristo Fernández Blanco, músico de la generación del 27; y los poetas de 36 Juan y Leopoldo Panero, así como la esposa de este último, Felicidad Blanc, y sus hijos Juan Luis y Leopoldo María Panero.
“Respetado” hasta ahora
El poeta peruano César Vallejo también tiene una sala dedicada en memoria de su estancia en la Casa en 1931 y en el metroil metros cuadrados de área de exposición Se conservan un buen número de manuscritos, fotografías, documentos, libros, audiovisuales, esculturas y una colección de pinturas donadas por Javier de la Rosa y Charo Alonso, sobrina de Leopoldo Panero.
En la denuncia valoran que hasta ahora los fines para los que se creó el Museo-Casa Panero “han sido respetados de forma ejemplar” con corporaciones municipales anteriores “sin importar diferencias políticas”. Señalan, por ejemplo, que con Arsenio García -del PP, como el actual concejal, José Luis Nieto Martínez- se impulsó, entre otras acciones, la financiación y museización de la Casa.
Conferencias, presentaciones de libros, exposiciones, recitales, conciertos… son parte de las actividades realizadas hasta el momento en este espacio.
“Lamentablemente, esta admirable continuidad ha sido roto por la corporación actual«, censuran, y señalan al concejal. Critican que el actual equipo de Gobierno pretenda »sustituir« las actividades anteriores que, según dicen, han calificado de »élite«, por otras »de Carácter populista y partidista.«. Como es el caso, señalan, »de tan dudoso gusto« de habilitarla como ‘Casa del Terror’.
Defienden que es un espacio público “que, como una biblioteca, un teatro o un auditorio, merece institucionalidad y respeto”. no debe ser profanado y utilizados para actividades espurias, como esta de Halloween, para la que existen otros lugares más adecuados en la ciudad.”
“Un insulto a la educación y la cultura”
Y concluyen lamentando que “los niños y jóvenes que, tan alegremente como irresponsablementeestás invitado a ocupar este lugar emblemático de la cultura española, entrar en él por primera vez para correr, jugar y divertirte, sin conocer ni valorar los valiosos fondos que allí se albergan, ignorantes por completo de la memoria y tradición cultural de la ciudad en el que nacieron y crecieron«.
“Un completo disparate y un insulto a la educación y la cultura”, concluye la carta con la airada denuncia. Profesores y catedráticas de diversas universidadesEntre los firmantes se encuentran escritores, artistas, periodistas y miembros de la Real Academia Española como Luis Mateo Díez, José María Merino o Clara Sánchez, a los que otros suman sus nombres como el Premio Nacional de Poesía Antonio Colinas; el poeta Luis Alberto de Cuenca; la directora de la Compañía de Teatro Clásico, Helena Pimienta, o Luis Alberto de Cuenca.