La joven pasó seis semanas en Sudáfrica y luego se dirigió a Nueva Zelanda. Cuando ella estaba en la ciudad de aucklandAbrió Tinder conocer a alguien durante su estancia en el país. La joven con la que tenía una cita. Jessie Kempson, 26 años de edad. Fueron a tomar unas copas al casino y estuvieron varias horas hablando. Sin embargo, horas después de conocer a la joven Grace dejó de responder a los mensajes y su teléfono apareció apagado.
Su cuerpo era situado el 9 de diciembre de 2018 dentro de un maleta cerca del parque Waitakere Ranges. Los agentes comenzaron la investigación y pronto llamaron a la puerta de Jesse Shane Kempson ya que era la la ultima persona quien dejó un mensaje en su perfil de Facebook.
En un primer momento, el joven aseguró a los agentes que se llevaron algo y que a medianoche Se separaron y cada uno se fue a su casa. Sin embargo, las cámaras de seguridad de una gasolinera captaron cómo Ambos se dirigían a su hotel. después de tomar unas copas.
Los agentes indicaron en ese momento que Kempson Parecía frío y distante.. “Se parecía al Dr. Jekyll y al Sr. Hyde”, dijeron.
Los agentes continuaron con las investigaciones y localizaron unas imágenes en las que se veía al joven comprando una maleta, el mismo en el que aparecía la joven, y productos de limpieza. Después de interrogarlo nuevamente, el joven admitió que había matado a gracia pero aseguró que fue un accidente luego de una noche de “sexo duro“.
El jurado rechazó el argumento y lo condenó a cadena perpetua con un período mínimo sin libertad condicional de 17 años tras unas horas de deliberación.
La Primera Ministra Jacinda Arden emitió entre lágrimas un disculpas a la familia de Millane, en nombre del país. “Debería haber estado segura en este país”, se lamentó.
palabras de madre
Ahora, cinco años después del brutal asesinato, la madre de la joven Quería enviarle un mensaje al asesino de su hija. La madre de Grace, Gillian Millane, dijo en el podcast The Extraordinary Ordinary que tiene exiliado Kempson de sus pensamientos.
“Él entró en nuestra vida y destruyó nuestra familia. No me importa su nombre, no me importa él”, anotó.
Respecto al juicio, la madre ha indicado que fue “horrendo“y ha dicho que tenía que sentarse en la sala del tribunal día tras día”mientras aniquilaban a mi hija“.
“Llegas a un punto en el que te das cuenta de que eres el único que puede sacarte de ahí”, afirmó. Ahora la madre intenta rehacer su vida tras perderla también marido debido a un cáncer agresivo.