El domingo 10 de septiembre fue cuando los compañeros se dieron cuenta de que carmen no estaba en el barco. La mujer no se presentó al servicio de desayuno y Tampoco estaba en su cabaña. Salvamento Marítimo recibió el aviso sobre las 8:20 horas del domingo.
A partir de ahí comenzó su búsqueda. Hasta el momento no se ha encontrado ningún rastro de la mujer.. El abogado que los representa, Diego Leis, asegura que aún no ha tenido acceso a las actuaciones del caso, según informa el diario ‘El Mundo’. “Resulta que la Guardia Civil los pasó al juzgado de Valencia, que parece haberse inhibido de su competencia y lo ha remitido a Gandía, donde todavía no lo han recibido ni admitido para darnos copia de las actuaciones”. “, explica el abogado al citado medio.
En Se encontró un periódico en su cabaña. en el que, según los investigadores, en algunas páginas ciertas frases podrían ser interpretadas en el que podría haber algún deseo de quitarse la vida.
El barco estaba llevando a cabo una campaña oceanográfica dentro de un proyecto europeo coordinado por la Instituto de Ciencias del Mar (ICM) del CSIC de Barcelona. En concreto, se trata de un estudio de las propiedades ópticas del fondo marino. Estaban midiendo parámetros físicos con la roseta oceanográfica, un dispositivo utilizado para tomar muestras de agua.
Denuncia por acoso sexual
Un año después de incorporarse al barco, Carmen denunció a un colega por acoso sexual. Aparentemente ambos Coincidieron en el vuelo y en el barco; pero, según la familia de la mujer desaparecida, el hombre Abandonó el barco antes de que la mujer desapareciera.
La familia de Carmen asegura que Ella se “animó” y “quiso embarcarse”. Excepto aquel día nueve, cuando parece que tuvo un cambio de humor y se desanimó.
la familia no tiene noticias
En una carta enviada a los medios, el portavoz de la familia lamentó hace un mes que, dos semanas después de la pérdida de María del Carmen Fernández, sSus seres queridos continúan en la misma “incertidumbre”sin avances de ningún tipo.”
Para la familia, la “falta total de comunicación” por parte del CSIC es “sorprendente e indignante”. “No sabemos si se aplicaron medidas o protocolos para prevenir el acoso. No sabemos los medios que dispuso el CSIC para la búsqueda en el mar, cuando en otros casos de desapariciones movilizó abundantes recursos, y no sabemos si durante la navegación las normas sobre seguridad marítima”, agregaron.