El premio ‘estrella’ o primer premio por mejor vino tinto de la cuarta edición del Concurso de Vinos Caseros de la provincia de Soria recayó en Antonio Puentedura, de San Esteban de Gormaz, mientras que el premio al mejor vino blanco recayó en Adrián Berar, de Langa de Duero, para vino blanco seco que lleva el nombre de su nieta ‘Ariana’, hecho entre abuelo y nieta; el rosado, para Sergio Narro, de San Esteban, y el Ojo de Gallo, para Bernabé Cerver, también de la misma localidad, informa Ical.
El jurado del Concurso de Vinos Caseros, organizado por el Club de Cata de Vinos del Casino Amistad Numancia y patrocinado por la Diputación Provincial de Soria, Catamos 30 vinos. El evento contó también con la colaboración de numerosas empresas agroalimentarias de la provincia de Soria y el apoyo del Ayuntamiento de Langa de Duero, las asociaciones culturales de Amigos de las Bodegas y del Castillo de San Esteban de Gormaz, El Pajarón de Morales y Lagunas Virgen de Villalvaro.
El presidente de la institución provincial, benito serranoAseguró que la cultura del vino en la provincia de Soria permite, entre otras cosas, fijar la población, transmitiéndola a las siguientes generaciones. “el cariño por los pueblos, la tierra y seguir trabajando en algo tan nuestro como el vino”. Añadió que difundir el trabajo en torno al vino, dentro y fuera de la provincia de Soria y dar a conocer la actividad vitivinícola es uno de los objetivos marcados por la Diputación Provincial, durante el acto que tuvo lugar en el Casino Amistad Numancia.
Confesó que, una vez establecido el concurso en la provinciale gustaría que esos vinos caseros dieran el salto a la categoría profesional de modo que Soria ve reforzada su economía y, por tanto, ofrece empleo y la oportunidad de asentar una población en torno a la producción vitivinícola.
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