La investigación policial partió de una serie de denuncias sobre robos violentos cometidos con similares características, entre el 17 de agosto y el 25 de octubre, y en los que coincidía la descripción del autor. El Mossos d’Esquadra Lo detuvieron el 26 de octubre en Barcelona.
Robos a punta de cuchillo en los que se hizo pasar por policía
El joven detenido no dudó usar la violencia si la situación lo requería. El primer robo se produjo el 17 de agosto, en el Baix Guinardò, donde robó en otras dos ocasiones.
En uno de los atracos a un taxista, el detenido subió al vehículo y afirmó ser un agente de los Mossos. mostrando una placa de identificación. Le dijo al taxista que le llevara a la comisaría de Gràcia, donde se bajó unos minutos, y tras volver al coche continuaron la carrera, momento en el que el ladrón aprovechó para sacar un cuchillo y amenazar a su víctima.
Días después, también se hizo pasar por un agente de los Mossos tras subirse a un taxi en Plaza Cataluña, a cuyo trabajador asaltó, informa ‘EFE’.
Robos en hoteles
El detenido también cometió Robos en hoteles de Ciutat Vella el 20 de septiembre y el 3 de octubre, en los que utilizó el mismo ‘modus opernadi’: ofreció su ayudar a los turistas quien salió de la recepción del hotel para tomar un taxi.
Una vez que se fueron, entró en la recepción y dijo ser amigo de las personas que se alojan en el hotel, pidieron la llave de la habitación, alegando que se habían olvidado algo. Entonces ella robó maletas y objetos de valor y tarjetas de crédito.
Al detenido, de 22 años, se le imputan siete delitos de robo con violencia o intimidación, delitos de lesiones, usurpación de funciones públicas, hurto, estafa y dos robos en hoteles del distrito de Ciutat Vella.