Las Cortes de Castilla y León tocan fondo


Las Cortes de Castilla y León subieron ayer un escalón más en el nivel de tensión que es una constante desde hace más de año y medio. Las dos sesiones del martes y miércoles, con el PP y Vox repitiendo una y otra vez la “traición del PSOE a España” -por la amnistía y la condonación de la deuda a Cataluña-, y el PSOE y Podemos acusando a los de Vox de los insultos y amenazas que reciben y de las movilizaciones en su sede, y llamando “cómplices” al PP, acabó estallando.

Y lo hizo durante el debate de una propuesta no de ley (PNL) presentada por el partido popular para mejorar las condiciones de los profesionales de la abogacía. La socialista Patricia Gómez subió al estrado de los oradores para defender la postura de su grupo, pero antes se dirigió al vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, para llamarle “indigno” por “el hecho obsceno de que no voy a reproducirse por respeto.” a esta Cámara”, un “hecho” que ya había ocurrido en la anterior PNL. “Basta de insultos y acusaciones”.

Luego fue el turno del abogado del Grupo Mixto, Francisco Igea, quien tachó de “impresentable” a Gallardo por “haber hecho tres veces el gesto de felación al banquillo socialista”. Y, como informó más tarde el PSOE, la vicepresidenta de la Junta se había dirigido hasta en tres ocasiones a Patricia Gómez y a su compañera Nuria Rubio haciéndoles dicha mueca, interpretación a la que no dieron el más mínimo atisbo de duda. Es más, aseguraron que se había dado en más ocasiones, acompañado de la expresión “vamos a chuparla”. Incluso el portavoz socialista, Luis Tudanca, añadió después que “no voy a discutir si es verdad o no porque lo es. Todos lo hemos visto y lo hace en todos los plenos.

Sin embargo, García-Gallardo negó “rotundamente” esa interpretación de su gesto, con lo que, dijo, pretendía simular un “lloriqueo”, con la “mano puesta bajo el ojo”. Pero la tensión en la cámara siguió aumentando y las voces y las descalificaciones empezaron a prevalecer, sobre todo cuando el portavoz de Vox, Carlos Menéndez, dijo desde la tribuna que “los únicos obscenos e indignos son los que venden España por siete votos”. El revuelo fue tal que el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, llamó a los portavoces de los distintos grupos para pedirles algo de orden y centrarse en los temas del orden del día, mientras suspendía la sesión unos minutos. .

Pero la tensión era tal que Incluso en la tribuna de oradores, cuando Pollán pidió calma, hubo choque entre el portavoz del PP, Raúl de la Hoz, y el abogado del Grupo Mixto, Francisco Igea, que gritó un severo “no me toques” cuando el primero le increpó tocándole en el hombro. Entre medias, gritos de “bandido” desde la bancada del PSOE hacia el vicepresidente de la Junta.

Finalmente, la sesión se reanudó y lo hizo con la petición de palabra del propio García-Gallardo y del socialista Luis Tudanca, a quienes Pollán tuvo que llamar al orden en dos ocasiones e incluso amenazó con expulsarlos del pleno si se producía una tercera sesión. , algo que no ocurrió a pesar de que ambos Siguieron hablando, casi gritando, cuando él les quitó la palabra: con el micrófono ya apagado. Igea también se pronunció -después de que Pollán dijera “acabemos con esto”- para afirmar que “me da vergüenza lo que está pasando aquí y más aún las risas del PP”.

El vicepresidente de la Junta, durante su intervención, negó “rotundamente” las acusaciones del PSOE de que su gesto fuera una felación ya que, Según sus palabras, fue “el gesto de llorar” porque “sois unos llorones”., dijo al tribunal socialista. Tampoco dio lugar a que se malinterpretara erróneamente su actitud, sino que la atribuyó al interés de los socialistas en poner otro número para desviar la atención. Además, aprovechó para señalar que “es patético, ridículo y vergonzoso que quieran tapar la gran traición del PSOE a esta tierra, al Estado de derecho y a la nación española con la cortina de humo que He traído aquí hoy.” “No nos van a parar, estuve el martes en Tordesillas y hoy -ayer- voy a estar en otra manifestación en Valladolid”, gritó entre las voces de los socialistas y las llamadas al orden de Pollán.

Por su parte, el portavoz de los socialistas le acusó de “haber atentado contra la dignidad de las mujeres, de su grupo y del Parlamento” y destacó que hubiera sido “más fácil” para García-Gallardo haber pedido perdón, aunque sostuvo que lo hizo. un “gesto obsceno y sexista y eso no se puede permitir”.

Tudanca apareció posteriormente acompañada de Patricia Gómez y Nuria Rubio para insistir en la “gravedad de los hechos” y denunciar que el presidente de las Cortes “ha perdido el control de la Cámara y no está a la altura” ya que “llama al orden a la oposición y mira para otro lado con Gallardo”. También acusó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, de ser “responsable y cómplice de hacer oídos sordos y no condenar sus palabras”. Por su parte, Gómez aseguró que Gallardo “desprecia a las mujeres, nos odia y no soporta que seamos libres”.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *