La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha formalizado el recurso directo contra el auto que imputa al expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont y a otra decena de personas por delitos de terrorismo en relación con los graves disturbios organizados por Tsunami Democràtic en 2019. Carga contra la decisión del juez porque considera que no existen elementos que apunten a las actividades delictivas que señala y solicita que el caso sea remitido a Cataluña por constitución de desorden público.
En concreto, el recurso firmado por el fiscal Miguel Ángel Carballo sostiene que no hay pruebas de Puigdemont en Tsunami Democràtic y también destaca “la intangibilidad” de los hechos en los que se basa la resolución. “Ya resulta significativo en el informe sumario policial, como en el caso de otros, que no se dedica ninguna sección o capítulo a los acusados ni se les atribuyen hechos concretos en relación con actividades delictivas relacionadas con el Tsunami”, señala la carta.
En este sentido, razona que “examinados los fundamentos en este sentido de la resolución impugnada, resulta claro que no puede establecerse ninguna conjetura sobre la responsabilidad penal de la citada persona en el presente proceso”. Entre otros argumentos, destaca que pese a formalizar tal acusación, García Castellón “no acepta presentar una solicitud” al Parlamento Europeo, del que es parlamentario, una “inacción que revela la intangibilidad de la acusación”.
Añade que “sorprende que después de cuatro años de investigación se diga que el caso en cuestión ‘ha asistido a la fase inicial en la que nos encontramos y la investigación no se ha agotado’ y sin que por ello se acceda a ninguna diligencia que podría profundizar en dicha participación.» de Puigdemont en los hechos.
«Por último, resulta cuanto menos ingenuo que una persona que se encuentra prófuga de la Justicia, precisamente desde el 2 de noviembre de 2017, cuando este mismo representante del Ministerio Público solicitó que se ordenara su búsqueda y captura en el procedimiento de la Audiencia Nacional que precedido del caso especial tramitado posteriormente en el Tribunal Supremo, se ofrece la ‘posibilidad de comparecer voluntariamente ante este Tribunal'”, añade el recurso de Carballo.
Terrorismo versus trastornos
Desde que se iniciaron las investigaciones en 2019, la causa contra los artífices de Tsunami Democràtic se cursaba por delitos de sedición y, hasta hace apenas unos meses, bajo secreto de sumario. La derogación de este acto ilegal del Código Penal dejó a los investigadores sin herramientas, como ellos mismos señalaron. Fue la pasada primavera cuando se puso sobre la mesa la posibilidad de enviar el caso a Cataluña porque los delitos serían desórdenes públicos y por tanto quedarían fuera de la competencia de la Audiencia Nacional.
El juez Manuel García Castellón nunca coincidió con este punto de vista, como quedó claro en el auto que el pasado lunes imputó a Puigdemont, a la número 2 de ERC Marta Rovira y al diputado del partido en el Parlamento de Cataluña Rubén Wassemberg, entre otros, por delitos de terrorismo.
Para el fiscal, la calificación es “insuficiente” y consta “sin fundamentación” en el auto, “más allá de exponer el contenido de los instrumentos internacionales que definen el terrorismo. Tampoco la resolución acuerda » ninguna diligencia que pueda ahondar en tal carácter terrorista”. “No hay otros delitos confirmados que no sean meros desórdenes públicos una vez derogada la sedición”, concluye.
Ni organización criminal ni delitos
Sostiene en esta línea que “no puede considerarse acreditada la participación concertada de más de dos personas en actividades delictivas”, de los hechos que la Guardia Civil atribuye al Tsunami “sólo dos de ellos tienen claramente relevancia delictiva” y la mera existencia de aquel plataforma especificada en perfiles en redes sociales y una aplicación “no determina por sí sola la existencia acreditada con los requisitos jurisprudenciales para la concurrencia de una organización o grupo criminal”.
Además, sostiene que “no se ha podido, si es que hay alguno, identificar a verdaderos líderes o líderes de la organización Tsunami Democràtic, en cualquier caso se puede apreciar una actuación coral” y dice que “en muchas ocasiones lo que está demostrado es que sean partidistas o que apoyen”, aunque “ninguno parece estar detrás de los graves hechos de orden público ocurridos en Barcelona”.
Finalmente, se entiende que “no es posible atribuir muertes, lesiones o daños a ninguno de los investigados, ya que, incluso admitiéndose la participación de algunos de los investigados en la convocatoria y promoción de actos como la ocupación de El Prat aeropuerto (…) en ningún caso los investigados pueden atribuirse a la previsión de muertes o heridos o daños materiales”, que fueron realizados en las calles “por personas no identificadas”.