Los menores vascos que queden huérfanos a consecuencia de un asesinato machista recibirán una subvención de 5.700 euros al año. Así se desprende del proyecto de decreto firmado el pasado jueves por la ministra de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Nerea Melgosa, que se ha hecho público este lunes. De esta forma, el Gobierno Vasco quiere “colaborar y contribuir en la medida de lo posible a reparar los daños causados”.
El texto parte de la constatación de que son muchas las “dificultades y obstáculos” que encuentran los menores afectados por episodios de violencia machista, que en muchas ocasiones se desencadenan a todos los niveles años después del asesinato de sus madres. “Parte del reconocimiento de hijas e hijos como víctimas directas de la violencia machista”, explican desde la concejalía. Su objetivo ahora es dar un paso más y contribuir a reforzar la “apoyo y asistencia” a los menores que sufran situaciones de “especial vulnerabilidad”.
Todos los menores que pierdan a sus padres como consecuencia de un delito sexista tendrán acceso a estas ayudas, con independencia de que fueran hijos biológicos o adoptados. El texto hecho público por el Gobierno vasco recoge en estos casos no solo las violencias perpetradas por parejas o exparejas, sino también “femicidios sexuales, sociales o intrafamiliares”. Todos ellos percibirán una retribución anual que para el año 2023 se ha fijado en 5.700 euros, aunque se irá actualizando en función de la evolución del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM).
Extensible hasta 25
Las víctimas tendrán derecho a recibir ayudas hasta que cumplan los 18 años, aunque los pagos podrán ser extender hasta 25 años cuando sufran algún tipo de discapacidad o tengan reconocido algún grado de dependencia. En estos casos, además, la cantidad a percibir será el doble. El proyecto también contempla la posibilidad de ampliar las tarifas cuando los jóvenes aún estén cursando estudios reglados, incluso cuando se trate de cursos de formación para desempleados. Desde el Ayuntamiento especifican que ello se debe a que uno de los principales objetivos del proyecto es “apoyar la educación como medio para forjar un futuro mejor y poder cumplir con el principio de igualdad de oportunidades”.
El decreto conocido este lunes contempla la posibilidad de recibir las ayudas retroactivamente. Para estos casos se ha previsto un pago único de 10.000 euros. El Gobierno Vasco estima que 40 menores, hijos de las 53 mujeres asesinadas desde 2003 en el País Vasco, podrán ser beneficiados.
Desde el consejo han destacado que las ayudas se han tenido que crear “prácticamente desde cero” ya que, aunque está previsto en la Ley de Igualdad que aprobó el Parlamento Vasco en marzo, la normativa “apenas ofrece información” sobre cómo regularla . El texto llega esta semana. en fase de audiencia pública y será cuando finalice este proceso cuando sea aprobado definitivamente por el Consejo de Gobierno. Esto implica que entrará en vigor a finales de este año o principios del próximo.