Unos 1.600 agentes de la Unidad de Intervención Policial serán los encargados de proteger el Congreso de los Diputados durante los dos días de inauguración de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. El Ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-MarlaskaQuiere impedir a toda costa que las protestas multitudinarias en la sede del PSOE se desplacen a las inmediaciones del hemiciclo, por lo que ha preparado un dispositivo para frenar cualquier incidente.
Marlaska, el PSOE y sus socios critican duramente cómo han funcionado los grupos que han liderado las protestas en Ferraz Lo mismo quieren hacer en la Cámara Baja, algo que ha supuesto recuperar viejos mensajes de dirigentes que años atrás no sólo no lo veían mal, sino que lo promovían.
Uno de los más vehementes fue Irene Montero. La que luego sería ministra de Igualdad gracias al acuerdo de Gobierno entre PSOE y Podemos pidió explícitamente que quienes iban a protestar contra la investidura de Mariano Rajoy en octubre 2016. Aquellas protestas fueron contra el PP y el PSOE, lo que añade otro punto de ironía a lo que está pasando hoy, y el movimiento quedó bautizado, y pasó a los anales, como “Congreso envolvente”.
Desde días antes de la sesión de investidura de Rajoy, que se desarrolló con la abstención de la mayoría de los diputados socialistas, de Podemos y otros partidos de su izquierda, como EH Bildusus seguidores se animaron a acudir a protestar a la sede del Congreso.
“El Congreso necesita defenderse de los corruptos y evasores de impuestos, no de los compatriotas que representamos”preguntó un Montero que, al entrar en la Cámara Baja, se encontró con las vallas que había preparado la Policía para proteger la zona.
Un tuit que, ahora, ha vuelto como parte de la hemeroteca digital de las redes sociales.
Aún se recuerdan las escenas de las protestas. Las pancartas y consignas gritadas contra el PP y contra Mariano Rajoy se mezclaban con las que También apuntaron al PSOE y a Pedro Sánchez que en esos mismos días presentó su renuncia como secretario general del partido, para regresar en unas primarias en 2017.
Durante las semanas previas a la investidura de Mariano Rajoy, en las redes sociales de Podemos se calentó una multitudinaria protesta contra el PP y también contra el PSOE. Irene Montero, entre otros dirigentes del partido morado, impulsó esas protestas.
No sólo Podemos estuvo al frente de estas protestas. Gabriel RufiánA este movimiento también se sumó el portavoz de Esquerra Republicana de Cataluña. En los últimos días se han recuperado imágenes de él aplaudiendo a quienes luego se acercaban a las inmediaciones de la Carrera de San Jerónimo.
“La policía de facha no nos deja participar en el #RodeaElCongreso arruinar a España…”
Gabriel Rufián de los Charnegos de Catalufa y Puigdemonguer de Todos los Santos
Congreso de los Diputados, Madrid, 2016.
⤵️⤵️⤵️ pic.twitter.com/EXnpu6pdfW-Mercedes (@mromvi) 7 de noviembre de 2023
Ahora ocurre todo lo contrario. Ahora son los grupos de izquierda los que piden respeto al proceso de investidura y critican las convocatorias de protesta en el Congreso.
“Hay Un sector reaccionario que no acepta la soberanía popular.», afirmó hace unos días Iñigo Errejón, en referencia a las protestas en Ferraz y al eventual desenlace que pueda darse en la investidura. Frases que hace 7 años hubieran sonado más propias de miembros del PP.