Los mandatarios catalanes, junto a otros tres expresidentes, se dan cita en Francia en un acto de homenaje al músico Pau Casals
En este acto, Puigdemont defendió la carrera del músico catalán, que durante su carrera se negó a actuar en Rusia y Alemania debido a sus regímenes políticos, y ya en el exilio rechazó el cargo de presidente de la Generalitat. El líder de Junts elogió a Casals por no buscar una “salida personal”, sino por pensar “en el campo”. Llevando su figura al presente, Puigdemont añadió que “tenemos derecho a hacer lo mismo por el país, por la lengua y por su gente”.
“Hoy, gracias al apoyo de Casals, podemos proyectarnos, reivindicarnos ante el mundo como lo que somos y podemos reivindicar la lengua como patrimonio de la humanidad”, en referencia al catalán. En este sentido, ha añadido que “cuando pedimos que el catalán sea una lengua de Europa, una lengua viva junto a las demás, lo hacemos siguiendo el mismo hilo de las generaciones que nos han precedido, pero pensando en los demás y no sólo en nosotros mismos”. , del mismo modo que lo hizo Pau Casals, sin buscar una salida personal para sí mismo”.
Por su parte, Pere Aragons aseguró que es necesario exigir “más que nunca” la amnistía y la autodeterminación ya que considera que “tenemos un conflicto político pendiente de resolver que no es por la represión sino por la negativa de los Estado español para que Cataluña decida libremente su futuro”. Así, lamentó como un “hecho excepcional” que los expresidentes catalanes se reúnan fuera del territorio español, en “las comarcas del norte”, en referencia al proceso judicial abierto contra Puigdemont. Por eso ha señalado que es “imprescindible” resolver el conflicto y encontrar una “salida democrática para que este acto de hoy se convierta en una normalidad”.
El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol también advirtió que la identidad y la lengua catalanas están “en peligro” y por ello instó a su defensa. Además, expresó su “particular reconocimiento” al expresidente Carles Puigdemont.