[ad_1]
Once meses después y tras un arduo trabajo de recuperación, el gallego volvió a lanzar oficialmente la jabalina el 12 de noviembre. Fue en Pontevedra, donde hace 20 años batió el récord de España, y repitió éxito: Marcó un nuevo récord nacional en jabalina con banco adaptado, con 29,48 metros en la categoría F55. “Fue bonito recordar viejas batallas en esta misma pista. Me sentí de nuevo deportista”, afirma sobre su último éxito, que quiso compartir “con la gente que me ayudó a recuperarme y a regresar a Galicia”.
No puede ir a París porque su disciplina no existe
Ahora Gustavo mira hacia el futuro, aunque los Juegos Paralímpicos de París, lamentablemente, no son una opción. “En estos Juegos no hay lanzamiento de jabalina en F55”, lamenta. Su deseo es seguir formándose -lo hace online con sus alumnos mexicanos y echa una mano a los más jóvenes en Pontevedra- y escalar marcas en el ranking mundial, en el que con su último lanzamiento ya tendría la quinta mejor nota. Sólo queda ratificarlo internacionalmente en futuras reuniones. “No me pongo un techo. Europeos, Mundiales… Y no sabemos si después de París podrían incluir mi categoría en algunos Juegos porque está cambiando”, dice esperanzado.
Diez veces campeón de España
Con todo, el diez veces campeón de España No cierra puertas y ya está pensando en probar otras disciplinas. “Estoy coqueteando con el piragüismo. He tenido contacto con un club y con amigos como David Cal y Teresa Portela. Quizás lo pruebe”, confiesa. Ese es su lema y su mejor terapia. “Es importante tratar siempre de tener la mejor actitud ante los desafíos que pueden surgir en la vida. Mientras mejor actitud tengas, antes saldrás de ella. He pasado por muchas cosas, sí, pero hay Todavía puedo lograr mucho más”, afirma.
Ejemplo de mejora
Mirando hacia atrás, Dacal recuerda que su Los síntomas eran típicos de la infección por dengue.. “Recuerdo que tenía dolor de espalda y fiebre. Me diagnosticaron y me dijeron que normalmente se solucionaba en una semana, pero en dos semanas pasé de estar sano a tener que afrontar cuatro cirugías. Mi vida estaba en riesgo. A partir de estar sana comencé a pensar en salvar mi vida”, afirma.
En febrero regresó a Galicia y, desde entonces, su recuperación ha sido brillante. “Lo que normalmente hacen los fisioterapeutas Ven recuperación en un año o año y medio, en tres meses ya me dieron el alta. Por eso tengo que estar contento con la situación en la que estoy”, celebra. “Cuando llegué a Galicia no podía moverme por mi cuenta. Ahora como sola, me visto sola… Eso también te ayuda a tener mejor ánimo porque ves que vas consiguiendo pequeñas cosas”, afirma.
[ad_2]