Fue entonces cuando el padre de la joven, que se encontraba cerca, fue alertado por los gritos de la mujer. Se acercó al hombre para recriminarle lo que había hecho y la respuesta del agresor fue que hizo lo que quiso “desde los huevos”. Poco después inició una lucha entre los dos hombres.
El padre, esquivando los golpes del atacante, le dio un golpe fuerte y cayó al suelo con un leve traumatismo craneoencefálico y otra lesión costal, fractura del suelo de la órbita del ojo derecho y una herida en la ceja por la que necesitó suturas con puntos sueltos y puntos de aproximación.
El Juzgado de lo Penal número 4 de Alcalá de Henares condenado en 2021 el padre del menor deberá pagar una multa de seis euros diarios durante siete meses por un delito de lesiones. Tras el recurso del maltratador, la Audiencia Provincial también le condenó a indemnizar al agresor por los días que tardó en recuperarse de sus heridas y por las consecuencias que le habría causado el puñetazo.
el caso empeora
El caso ha escalado y ha sido elevado a la Corte Suprema. El recurso del padre ha sido desestimado por una cuestión de forma: afirmó haber actuado por un ataque, movido por un “reflejo natural” al intentar separar al hombre de su hija tras sufrir un abuso sexual. Esta atenuante no ha sido válida porque no está contemplada en el relato de hechos probados. Asimismo, la Cámara ha condenó al agresor del menor a uno multa seis euros al día durante veinte meses y un Orden de restricción Un año de la víctima por un delito de abuso sexual.