María ha sido operada en seis ocasiones y, para ello, fueron necesarias seis extracciones de sangre para anestesia, así como diversas pruebas en las que fue necesario dormirla. Cada año necesita una extracción de sangre para sus controles con el hematólogo y el endocrinólogo, así como una punción para la vacuna antigripal, ya que los pacientes con 22q11 tienen la sistema inmunológico muy débil.
“Ella se convirtió en la niña del exorcista”
“Cada extracción de sangre es una tortura “Para ella”, nos cuenta su madre, Elena Escuderos. “Mi hija se convirtió en la niña del exorcista, hemos necesitado hasta cuatro personas para inmovilizarla”. “El miedo que sufre a las agujas es tan grande que el neuropediatra le recetó Transilium y No sirvió de nada”, nos cuenta.
El miedo de María hizo que comenzara una terapia de exposición gradual a agujas hace cinco años con un psicólogopero no funcionó en absoluto hasta el Hospital de Jaén lanzó ‘Vampitour’. Esta es una serie de sesiones informativas y adaptativas para pacientes con miedo a las agujas y con el objetivo de reducir su ansiedad ante la punción necesaria para la extracción de sangre, el tratamiento o los quirófanos.
Desde la Dirección de Atención del Hospital Universitario de Jaén nos explican la iniciativa a la que ha sido sometido el paciente: “Es un plan de visitas que incluye todos los espacios donde se puede conocer para qué sirve y cómo se realiza la extracción de sangre”. . “, el diálogo con los profesionales, los instrumentos utilizados, hasta llegar al momento de la extracción y colocación previa del compresor.”
“Ha sido un milagro”
“‘Vampitour’ está haciendo el mismo recorrido que hace un paciente al que le van a sacar sangre, desde que entra en el hospital hasta que sale con el algodón en el brazo”, afirma Elena.
Luego de completar la gira el 22 de septiembre, el 4 de octubre fue el extracción real. “María entró sola al palco”, cuenta su madre, “se sentó sola, levantó el brazo y dejó que la pincharan”. Sin ningún problema“Yo digo que ha sido un milagro hecho realidad”, confiesa.
Este tipo de acción implica un gran alivio y un paso adelante para los pacientes y familiares que sufren este tipo de situaciones, especialmente en el caso de niños y niñas, por lo que desde el centro hospitalario “nos sentimos realmente satisfechos con el desarrollo de esta nueva experiencia”, afirma Carmen Vasco, jefa de bloque de el Hospital Materno Infantil, a cargo de este procedimiento junto a Carmen Mercada, jefa del bloque de Laboratorio.
Tanto Elena como José Luis, el padre, se sienten muy orgullosos del trabajo de su hija: “Es todo un ejemplo de mejora“, nos dicen. Lo ideal, señalan, es que antes de la siguiente extracción María vuelva a realizar el ‘Vampitour’ para “no volver atrás”.