«Madrid, por fin, respira». José Luis Martínez-Almeida pronunció esta frase en enero de este año. Era la primera vez que el capital no superaba apenas la umbrales de dióxido de nitrógeno fijado por la Unión Europea. Límites que se habían traspasado desde que comenzaron los registros. Una vez salvado el año 2022, la ciudad se prepara con optimismo para el balance de 2023. Según el valor medio hasta el mes de octubre, el punto negro de contaminación de Madrid, el que supera las líneas rojas, la Plaza Elíptica, marca 35 microgramos por metro cúbico (μg/m3), por debajo de los 40 μg/m3 fijados en Bruselas y los 39,77 μg/m3 del año pasado.
La Plaza Elíptica es sólo un ejemplo. El valor medio anual de dióxido de nitrógeno ha caído en las 24 estaciones de medición repartidas por la ciudad en los últimos cuatro años, desde que Almeida tomó el testigo en Cibeles y puso en marcha su estrategia medioambiental, bautizada como Madrid 360. las cifras más bajas desde 2010cuando el entonces alcalde Alberto Ruiz Gallardón creó la Comisión de Calidad del Aire, dos años después de que se aprobara la Directiva 2008/50/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de mayo de 2008, relativa a la calidad del aire y una atmósfera más limpia en Europa.
Este órgano colegiado se reúne cada año y, este viernes, el concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha repasado la evolución de la calidad del aire durante 2022 y 2023. La conclusión es que, “previsiblemente”, Madrid cumplirá con los Parámetros europeos por segundo año consecutivo y con “mejores registros” que el anterior. El alcalde también ha destacado que la ciudad está por delante de otras grandes capitales como París, Berlín, Roma y Londres -aunque ya no se rige por estándares comunitarios-, que sí superaron los niveles permitidos en 2022.
Evolución de la calidad del aire en la capital
Datos hasta octubre de 2019
Datos hasta octubre de 2022
Datos hasta octubre de 2023
Estaciones de
Medición de NO2
Plaza de España
Escuelas Aguirre
Ramón y Cajal
Arturo Soria
Villaverde
Linterna
Cabaña
Cubiertas
Plaza del Carmen
Moratalaz
Cuatro maneras
barrio del pilar
vallecas
Méndez Álvaro
Castellana
Retiro
Plaza de Castilla
Ensanche de Vallecas
Urbanización Embajada
Cuadrado elíptico
Sanchinarro
El cafe
juan carlos i
Tres olivos
Fuente: ciudad de madrid /A B C
Evolución de la calidad
del aire de la capital
Datos hasta octubre de 2019
Datos hasta octubre de 2022
Datos hasta octubre de 2023
Estaciones
medición
de NO2
Plaza de España
Escuelas Aguirre
Ramón y Cajal
Arturo Soria
Villaverde
Linterna
Cabaña
Cubiertas
Plaza del Carmen
Moratalaz
Cuatro maneras
barrio del pilar
vallecas
Méndez Álvaro
Castellana
Retiro
Plaza de Castilla
Ens. de Vallecas
Urb. Embajada
Cuadrado elíptico
Sanchinarro
El cafe
juan carlos i
Tres olivos
Fuente: ciudad de madrid /A B C
La contaminación ha sido abordada por el consistorio durante la última década (con mayor o menor éxito) y, aun así, la capital ha incumplido los valores máximos de dióxido de nitrógeno desde 2010 y hasta 2021, con . Este viernes, sin embargo, Carabante ha informado de la “relación directa” entre los nuevos resultados y las políticas implementadas por el Ayuntamiento de Madrid desde 2019, como las tres zonas de bajas emisiones que liberan el centro -el mismo perímetro que el Madrid Central de Manuela Carmena-, la plaza Elíptica y, progresivamente, todo el municipio madrileño de coches sin etiqueta ambiental (denominado A, el más contaminante).
La comparación entre 2019 y 2023 es un buen punto de partida. En el periodo comprendido entre el 1 de enero y el 31 de octubre los valores medios de dióxido de nitrógeno han disminuido en cada una de las 24 estaciones. Los registros de la más problemática, Plaza Elíptica, se reducen un 36%, pasando de 55 μg/m3 en 2019 a los 35 μg/m3 actuales. Escuelas Aguirre, otra de las estaciones que acumulaba peores datos, cayó un 41%, de 53 μg/m3 a 31 μg/m3. La tercera de la lista es Plaza de España que, si bien sube cuatro puntos respecto a 2022 (de 23 a 27 μg/m3), baja un 34% respecto a 2019, cuando marcó 41 μg/m3.
Vista desde Madrid, con el cielo despejado, desde la Casa de Campo
El resto de estaciones presentan variaciones menores, según los datos facilitados por el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, aunque se mantienen lejos de la escala europea de 40 μg/m3. En cualquier caso, la batalla contra la contaminación continúa. En octubre de 2022, la Comisión Europea propuso revisar la directiva para recortar los niveles establecidos en 2008, en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El valor límite anual de dióxido de nitrógeno se reduciría a la mitad, de 40 μg/m3 a 20 μg/m3. Y sólo cuatro estaciones permanecen por debajo de ese número.
Hasta que no bajen los límites, el Madrid cumple. La mayoría de las políticas aplicadas por Almeida abordan la contaminación procedente del tráfico rodado, con este calendario de restricciones progresivas que se completa en 2025, cuando no vehículo A (diesel matriculado antes de 2006 y gasolina matriculado antes de 2001) pueden circular en la ciudad. Estos vehículos dan en el blanco porque emiten 1,6 veces más gases que los de clasificación ambiental B; 7,2 veces más que C y 47 veces más que los que tienen clasificación ambiental ECO.
De momento, la M-30 y el interior del anillo están prohibidos; Las cámaras se activan y el plazo de aviso concedido por el Ayuntamiento de Madrid finaliza el 14 de enero. Desde la implantación de esta gran zona de bajas emisiones, la entrada de turismos A más allá de la M-30 ha caído un 63,11%, entre junio de 2019 y septiembre de 2023, de 544.033 accesos a los 200.686 actuales, según datos municipales.
En la Comisión de Calidad del Aire este viernes, el concejal Carabante ha enumerado otras medidas implementadas en los últimos años. Hay partidas de subvención a partir de 2020, como los 55 millones de euros en ayudas para la renovación de vehículos o los 33 millones para el cambio de calderas antiguas. CUALQUIERA la “descarbonización total”, en 2022, de la flota de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT)que ha eliminado todos los vehículos diésel.