Demandan al alcalde de Nueva York, Eric Adams, por una presunta agresión sexual



El corregidor de Nueva York, Eric Adams, ha sido demandado por una mujer por una presunta ataque sexual. Para conocer los hechos hay que remontarse hasta 1993, momento en el que el político demócrata ocupaba un cargo interiormente del Unidad de Policía del estado estadounidense.

La identidad de la mujer que ha interpuesto la demanda no ha sido revelada. Ha solicitado cinco millones de dólares (4,6 millones de euros) en concepto de los daños y perjuicios en una demanda civil presentada frente a el Tribunal Supremo del estado de Nueva York, en Manhattan, según ha explicado Politico y recoge Europa Press.

“No sucedió”

En el escrito, la mujer afirma que se produjeron “lesiones físicas, psicológicas y de otro tipo” que podrían constituir un supuesto delito sexual en virtud de la Ley de Supervivientes Adultos, que da la opción de demandar incluso si el delito ha prescrito. “No regalo favor conocido nunca a esta persona. Y nunca haría daño a nadie con esa magnitud. No sucedió“, ha dicho Adams. Este ostenta el cargo de corregidor tras imponerse en las elecciones de 2021 a su rival republicano, Curtis Sliwa.

Esta demanda se ha producido a posteriori de que la Oficina Federal de Investigación (FBI) haya destapado una investigación contra Adams por presuntas irregularidades en la cobro de fondos para su campaña electoral en relación con una empresa constructora con sede en Brooklyn.

Todo se desencadenó en el año 1993, cuando Eric Adams ocupaba un puesto en el Unidad de Policía del estado estadounidense. La identidad de la denunciante no ha trascendido. Lo que sí se sabe es que ha pedido cinco millones de dólares, unos 4,6 millones de euros.

Al parecer, según relata la mujer, se llegaron a producir “lesiones físicas, psicológicas y de otro tipo”. Estas podrían tratarse como un supuesto delito sexual en virtud de la Ley de Supervivientes Adultos.

La delación se ha producido unas horas antaño de que terminara una ventana admitido de un año para apañarse probidad por la vía civil.

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