¿Cuál es la diferencia entre el cigarrillo electrónico y la cachimba?
Todavía hay desconocimiento sobre el diferencia entre estos dos dispositivos. El responsable de la Unidad para Dejar de Tabaquismo del Hospital Universitario del Vinalopó, Iván Suárez Lorenzo, lo explica: “la cigarrillo electrónico Está formado por un cartucho que contiene e-líquido y que, tras calentarse, activado por succión, libera vapor. El funcionamiento del narguile Es similar a una máquina para cocinar tabaco: cuando se aspira a través de una manguera, el trozo de carbón incandescente colocado encima calienta el tabaco aromatizado y produce el aerosol que posteriormente se inhala”.
Este, “contiene niveles de monóxido de carbono procedente de la combustión del carbónconocidos carcinógenos tóxicos y humanos, como la nicotina”.
Los peligros de consumir estos dispositivos
El peligro de inhalar el vapor producido por este tipo de aparatos es muy alto. Se inhala un aerosol de pequeñas partículas que tiene lo peor del tabaco y también otros factores que aumentan a irritación pulmonar y el tracto respiratorio. Además, ya se ha demostrado que Es el origen de la neumonía y la bronquiolitis.
Otro peligro es que, al incluir aromas, llama la atención de la población joven. Estos aromas tienen diacetilo, una sustancia química que está directamente relacionada con la bronquiolitis.
En cuanto a los cigarrillos electrónicos, aunque los problemas más graves se pueden ver en el futuro, también hay problemas que aparecen a corto plazo, como tos, irritación local o, lo más grave, una lesión pulmonar asociado con estos dispositivos llamado Evali.
Las cachimbas también causan peligros a corto plazo, como aumento de la frecuencia respiratoria, reducción de los flujos distales o disnea. En este caso, la consecuencia más grave es un peligro que podría ocurrir a largo plazo y está asociado a la policitemia, una enfermedad sanguínea grave lo que hace que la médula ósea produzca más glóbulos rojos. Aunque también podría aparecer cáncer de pulmón o enfermedad pulmonar obstructiva crónica, según el doctor Suárez.
Aunado a todo esto, ambos médicos advierten que, además, estos dispositivos generan adiccion, contengan o no nicotina. “Al hacerlos más atractivos para los jóvenes, pueden generar una dependencia psicológica y gestual y fomentar el consumo de otras sustancias, como el cannabis. Es una forma de iniciar el consumo.“, aseguran.