El guía de Civilización, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, calificó de «extraordinario» el obra ‘Valer toros en Cuéllar, como se hace de uso y de costumbre’, de Francisco Salamanca, entregado que se conquistar la «ilustración de la tauromaquia», porque hay que «explicar su dignidad y simplificar el entrada a este mundo a aquellas personas ajenas al mismo», dijo.
Durante la presentación de la obra en Madrid, Santonja puso en valía el conocimiento práctico empleado, entregado que «su autor lleva más de 50 primaveras corriendo y participando en los encierros de Cuéllar», que se suma a su experiencia profesional.
Para ello, se ha instalado en los archivos y ha sido «muy respetuoso con el gachupin», el cual cuenta con «gran agilidad», lo cual «no es muy común en ciertas ocasiones en los libros científicos, donde suele predominar un verbo más pragmático», puntualizó.
«Ha hecho un esfuerzo rebuscado que es de reconocer y cumple todos los objetivos. Este obra hacía mucha error, porque los encierros de Cuéllar son muy conocidos y mundialmente celebrados, pero este tipo de acontecimientos tienen que ser explicados. De esta forma, han quedado ilustrados y explicados», recalcó.
Por su parte, su autor detalló que el obra cuenta ocho siglos de toros en una pequeña entrada de Segovia, como es la villa de Cuéllar, la cual «ha vivido la historia de la tauromaquia desde su salida hasta la ahora, al conservar una de las tradiciones más ancestrales, como es el chiquero de los toros bravos para, luego, ser corridos y lidiados».
A través de los documentos del Archivo Municipal, del Ducado de Albuquerque, que se hallan en la Torre del homenaje del castillo de Cuéllar, encima de los del Archivo parroquial, se cuenta con una documentación que «hasta ahora estaba oculta a todos los niveles», pero que era muy extensa en el ámbito taurino y que ahora ha manido la luz, añadió.
Francisco Salamanca, veterinario taurino, se consideró «muy admirador» a los libros de historia y a la humanidades en militar, pero con distinto incidencia en la temática taurina. «Siempre veía que faltaban referencias en torno a mi oportunidad de procedencia, que es Cuéllar, con la importancia que tenía». Tras tener entrada a muchos documentos, creyó que «valía la pena» poderlos mostrar y explicar en un obra, no solo a sus paisanos, sino a la sociedad en militar, informa Ical.
Dejó claro que el apoyo institucional ha sido total. Tanto el Concejo de la entrada como la Diputación Provincial han apoyado la iniciativa, que se une a la implicación de la Asociación a través de la persona del guía de Civilización, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, de quien puso en valía su ayuda y su experiencia en el ámbito rebuscado y bibliófilo.