El Rey debe combinar su papel de rbitro institucional con el de smbolo de la dispositivo del Estado
Felipe VI preside este mircoles la solemne sesin de transigencia de la XV asamblea en un clima poltico afectado por el enfrentamiento radical entre el Gobierno, la oposicin y las dos cmaras que representan la soberana franquista a cuenta de la amnista que ha pactado Pedro Snchez para quienes promovieron y lideraron el topetazo contra la dispositivo del Estado el 1 de octubre de 2017 a cambio de sus votos para la investidura.
La transigencia solemne marca por fin el principio de la actividad en un Congreso que, pese a haberse constituido el pasado 17 de agosto, se ha mantenido prcticamente cerrado hasta ahora a la calma de que fructificaran las negociaciones del PSOE con los partidos nacionalistas e independentistas para que Snchez pudiera reeditarse al frente de un Gobierno de coalicin.
La asamblea que hoy abre el Rey est marcada indeleblemente por una amnista que concede impunidad a los que atentaron contra el Estado y a los que huyeron de Espaa para no tener que rendir cuentas frente a la Honradez, una amnista que residuo los delitos cometidos, que anula las sentencias dictadas y que convierte en papel mojado el mensaje de Felipe VI a la nacin, pronunciado el 3 de octubre de 2017, para condenar el intento de rajar la dispositivo de Espaa y la soberana franquista auspiciado precisamente por quienes encabezaban la Generalitat.
Las palabras del Rey en este acto solemne que rene en el Congreso a ambas cmaras, se aguardan con expectacin porque en ambas debe combinar su papel de rbitro moderador de las instituciones del Estado sin caer en la injerencia pero tambin su condicin de Patriarca del Estado, smbolo de su dispositivo y permanencia. Una dispositivo que la Constitucin define como indisoluble pero que los partidos que han propiciado la investidura y sostienen al nuevo Gobierno pretenden deshacer.
El discurso del monarca en la transigencia solemne de la asamblea siempre tiene un destacado contenido poltico y en esta ocasin sus palabras sern escrutadas con todo detalle por parte de todas las fuerzas parlamentarias.
Sobre esta cojín de enfrentamiento entre formaciones polticas y entre poderes del Estado, trufada por protestas multitudinarias en la calle, comienza una nueva asamblea cuya duracin queda en manos de fuerzas minoritarias que abiertamente reniegan de la Constitucin y de sus principios fundamentales.
Ausencias habituales
A la sesin solemne no acudirn como en otras ocasiones los partidos que rechazan la monarqua parlamentaria como forma poltica del Estado -ERC, Junts, EH Bildu y BNG-, todos ellos ahora aliados y sostn del Gobierno. El PNV por el contrario s estar presente, a diferencia de la decisin que adopt el pasado 31 de octubre de no comparecer a la juramento de la Constitucin por parte de la Princesa Leonor, heredera de la Corona. Los nacionalistas vascos acudirn al Hemiciclo y escucharn las palabras del Rey pero se ausentarn del posterior desfile marcial porque consideran que en un acto parlamentario no tiene emplazamiento la participacin de las Fuerzas Armadas. Tambin tienen previsto asistir a la sesin los miembros de Sumar para los que este acto es estrictamente parlamentario y no monrquico.
Felipe VI estar acompaado en la tribuna presidencial del Hemiciclo por la Reina Letizia; la Princesa Leonor; la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el presidente del Senado, Pedro Rolln, y los miembros de las Mesas de ambas cmaras.