Ayer de fin de año, si se cumplen las previsiones, entrará en vigor el nuevo reglamento del taxi de la Comunidad de Madrid. Un texto que ha sido combatido desde algunas asociaciones del sector, y que según las autoridades regionales, flexibiliza el servicio y mejoría su calidad, encima de modernizar este servicio manifiesto. La norma permite el taxi compartido –que traslade a varios usuarios que compartan trayecto–, aumenta de 3 a 15 el número mayor de licencias que puede tener un solo propietario, y autoriza a arrendar un transporte de sustitución que sustituya al taxi en caso de avería.
Ya se ha solicitado el juicio de la comisión jurídico-asesora sobre el nuevo reglamento del taxi. Así que sólo desidia que se conozca este para la aprobación definitiva, que se producirá en diciembre, y su puesta en marcha, antaño de que acabe el año, explicó el guía Carlos Novillo, en funciones de portavoz ayer por indisposición del titular, Miguel Serafín García.
La norma fija que el número mayor de licencias que puede tener un mismo titular pase de la 3 que se admiten actualmente a 15. Esta iniciativa, explicaron en la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, que dirige Jorge Rodrigo, pretende «mejorar el servicio y atender las demandas de los profesionales».
En servicio 24 horas
El reglamento contempla que los taxis podrán estar en servicio las 24 horas del día durante 5 días de la semana. Serán los ayuntamientos los que determinen qué días son esos, aunque el guía Rodrigo intuye que las dos jornadas libres serían una lectivo y otra del fin de semana.
Esta medida ha sido una de las más contestadas desde el sector, por considerar que suponía la «uberización» de este servicio. Sin confiscación, en el Gobierno regional creen que permitirá a los profesionales ingresar hasta un 30 por más, encima de ayudar al seguridad entre propuesta y demanda. Esto podría contribuir encima a que los titulares de licencias interesados en tener sus vehículos circulando las 24 horas contraten a otras personas, lo que calculan que podría originar hasta 2.000 nuevos puestos de trabajo.
Compartir delirio
A partir de la entrada en vigor de esta nueva legislatura, se incorpora la modalidad de taxi compartido, a precio cerrado. Con ella, un ciudadano podrá contratar un trayecto de forma telemática y, durante el mismo, el transporte podrá realizar paradas para que se suban otros viajeros que previamente han contratado compartir todo el represión o parte de él. El coste que pagará cada uno será proporcional al itinerario estudioso y la suma de estos importes no podrá ser superior a la que abonaría un único adjudicatario por idéntico represión.
Enterarse idiomas
Los taxistas tendrán que acreditar más conocimientos para poder practicar esta profesión: deberán entender ubicar los lugares de interés del municipio en que trabajan, y todavía producirse una prueba realizada por los ayuntamientos. En ella, deberán acreditar que tienen «nociones suficientes del idioma castellano que permita la comprensión de las indicaciones de usuarios», y todavía nociones de inglés y del manejo de dispositivos, así como de primeros auxilios. Otro requisito a cumplir es el de estar libres de condenas por delitos contra la franqueza sexual.
Coche de sustitución
Una avería puede ser un drama para un taxista, si le obliga a estar diez días o dos semanas con el coche parado y sin ingresos. Para evitar esta situación, el reglamento permitirá al taxista arrendar un coche de sustitución en caso de averías, y seguir trabajando con él. Se autorizarán a empresas que se dediquen al arrendamiento de vehículos sin conductor a arrendar coches que actúen como taxis y estén identificados como tal, y que cuenten con taxímetro y el resto de utensilios necesarios.
Leasing o renting
Hasta ahora, los titulares de osadía de taxi debían ser dueños del vehícuo. A partir de ahora, podrán poner en circulación taxis que no tengan en régimen de propiedad, sino que hayan conseguido con otros sistemas de arrendamiento como leasing, renting u otros, que les resulten económicamente más rentables.
¿Cambio de color?
Aunque en algunos borradores del reglamento se contemplaba la posibilidad de permitir que los taxis no fueran de color blanco, sino que pudieran utilizar otros colores en función de su potencia fiscal o los colectivos a los que atendiera (modificando para ello el artículo 25 del contemporáneo reglamento), fuentes de la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras puntualizan que se mantendrá la deber del color blanco. No obstante, se contempla que los ayuntamientos, si se producen peticiones al respecto y en determinadas circunstancias, podrían permitir que los taxis tuvieran otra apariencia.
Las VTC, a punto
El guía Carlos Novillo aseguró que en paralelo a este reglamento del taxi, se está trabajando todavía en el de las VTC, que todavía se someterá en breve al referencia de la comisión jurídica asesora, para poder aprobarlos uno y otro «con diferencias de pocas semanas».