Si le ofrecemos a nuestra Poinsettia los cuidados necesarios, podremos disfrutar de ella no solo durante las fiestas de Navidad, ya que podremos tender su vida hasta las próximas festividades, para las cuales deberemos prepararla para que gocen de su rojo característico.
Ubicación y luz
Coloca tu Poinsettia en un puesto con luz indirecta brillante. Evita la exposición directa al sol, ya que esto puede liquidar sus hojas. Adicionalmente, protégela de corrientes de corriente frío. Los cambios de las condiciones de temperatura y de resplandor le afectan negativamente, por lo que será más que recomendable moverla lo menos posible.
Temperatura
Esta planta prefiere temperaturas cálidas que ronden entre los 15 y los 20 grados durante el día y levemente más frescas por la incertidumbre. Mantén la galantería de Pascua alejada de fuentes de calor como radiadores o corrientes de corriente frío. Las fuentes de calor pueden quemarla y deshidratarla.
Riego
Asegúrate de regarla de modo adecuada. La tierra debe mantenerse levemente húmeda, pero evita el encharcamiento para evitar la pudrición de las raíces y el ahogamiento de la planta. Deja que la capa superior del sustrato se seque ayer de retornar a regar.
Humedad
La Poinsettia disfruta de ambientes húmedos. Puedes rociar sus hojas con agua para aumentar la humedad o colocar un plato con guijarros y agua debajo de la martillo sin que toque el fondo de la misma.
Fertilizante
Durante la temporada de crecimiento, fertiliza la Poinsettia con un pago controlado, por ejemplo, un NPK 15-15-15, una vez al mes para mantenerla saludable y vibrátil.
La poda
Posteriormente de la temporada navideña, puedes recortar la planta para fomentar un crecimiento más compacto. Para ello corta los tallos a 10-15 centímetros del y continúa con un mantenimiento regular. Si queremos dejar crecer a nuestra galantería de Pascua, debemos tener en cuenta que puede calar a alcanzar hasta los 3 metros.
Consejos de sanidad
A la hora de purificar hojas marchitas o de proceder a la poda, es importante memorizar que la energía lechosa que producen los tallos produce irritación tanto en la piel como en los fanales. Por esta razón, será aconsejable manipularla con guantes o lavarnos perfectamente las manos tras vernos expuestos a ella.
Cómo sostener su belleza
Para sostener su belleza pasada la Navidad y hacer que vuelva a destacar durante las próximas fiestas, deberemos comenzar con sus cuidados en la primavera. A principios de la etapa, deberemos dominar el riego, forzando a la galantería de Páscua a entrar en un período de reposo. A mediados, podaremos la planta para fomentar la concepción de nuevos brotes. A principios de septiembre comenzaremos gradualmente a dominar su exposición al sol, haciendo así que logre esos tonos rojos.
Consultorio
Las hojas de mi mandioca parecen decaídas, ¿a qué puede deberse? ¿Hay poco que pueda hacer?
Gracias por su consulta. El estado en el que se encuentran las hojas de su mandioca, según las fotos adjuntadas, parece ser conveniente a la podredumbre de las hojas, poco popular en las plantas de interior. Esta afección ataca al follaje cuando las hojas se mojan, ya sea por el riego o por la tromba. Esto es causado por una afección fúngica, que se instala en la planta conveniente a las condiciones en las que se encuentra, temperaturas altas acompañadas de humedad. A la hora de regar nuestras plantas es importante no mojar las hojas, ya que puede provocar situaciones como ésta.
Para tratar este mal, debe separar la planta afectada de las demás para evitar la propagación. Retirar las hojas más afectadas, si el brote inalterable se encuentra infectado, sería recomendable podarlo. A la hora de manipular los restos de la poda o virginidad que lleve acabo, cuide de no arrimar estos a otras plantas para evitar su propagación.