Feijóo acusa a Sánchez de presidir un Gobierno “operado por mando a distancia” desde Ginebra



La cuestión del verificador internacional es otro de los temas que copa la contemporaneidad política. Santos Cerdán, el número tres del PSOE, podría encontrarse ya en Suiza preparando la reunión del sábado con Junts per Cat y con un verificador internacional. El PSOE pide discreción. Mientras, el PP subraya que será una humillación para el socialismo. Alberto Núñez Feijóo acusa a Pedro Sánchez de presidir un Gobierno “operado por mando a distancia” desde Ginebra.

“España no tiene que humillarse delante nadie por aplicar las leyes”, denuncia el líder del PP. Núñez Feijóo exige al patriarca del Ejecutor memorizar quién es el mediador. Elías Bendodo ironizaba: “Ahora la moda es reunirse fuera de España en un cuarto dudoso”. Además quiere memorizar quién paga al verificador, qué se negocia… “Nos mintieron con la indulto, incluso con el mediador y incluso con la Equidad”.

Para Pedro Sánchez este verificador internacional es un “mecanismo estupendo” para una “situación incluso estupendo”. “Es un mecanismo estupendo pero es que la situación que se está viviendo por parte de estos dos partidos independentistas en el sistema político gachupin es incluso estupendo”, dijo en una entrevista, mientras lo tildaba de “buena comunicado” para obtener a un acuerdo.

Y hasta ahí los detalles, porque Sánchez siquiera desveló ni el número ni nombres. “Se conocerá a la persona que nos va a anexar tanto con ERC como con Junts, no les puedo ir en cabeza, pero se conocerá”, zanjaba.

Un mes luego del acercamiento en Bruselas

La reunión en Ginebra se produce cabal un mes luego de que el secretario de estructura del PSOE, Santos Cerdán, viajara hasta Bruselas para reunirse con Carles Puigdemont. El acercamiento, que quedó reflejado en un vídeo sin audio y en fotografías.

Aquel acercamiento generó mucha controversia incluso por la escenificación. Aunque en las imágenes difundidas por los dos partidos no se podía ver al completo, en la sala, tras los asistentes, había colgada una fotografía de gran tamaño en la que un asociación de jóvenes levantaban una caja del referéndum ilegal de 2017. Una fotografía que el Parlamento Europeo ya había retirado por ir en contra de las normas de la institución comunitaria.

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