La alcaldesa de La Cierva (Cuenca), Christiana Scharfenberg, ha denunciado delante la Protección Civil «un acto de acoso» al encontrar en la entrada de su domicilio habitual y de un circunscripción de su propiedad casi una veintena de patas de ciervo que cualquiera había arrojado.
Por otra parte, la primer concejal todavía ha puesto en conocimiento de las autoridades la vandalización de una señal del parque pueril, rota y puesta en marcha, en concreto la que prohibía la entrada de perros al perímetro, según ha informado el PP de Cuenca en una nota de prensa.
La alcaldesa se encontraba los restos de estos animales en la tarde el pasado domingo, 26 de noviembre. Christinana Scharfenberg informaba a sus vecinos tanto del «desagradable» hallazgo en su casa y finca como del destrozo del cartel. «Entrando las navidades me duele mucho este acto hostil», afirma la alcaldesa.
Scharfenberg ha lamentado estos sucesos y considera «innecesario» que se produzcan especialmente en un municipio tan pequeño como La Cierva, «donde todos nos conocemos y no es complicado conversar y contrastar opiniones y puntos de pinta».
La alcaldesa ha querido defender la palabra «como el mejor útil para el entendimiento y la convivencia entre vecinos», máxime cuando en el municipio, las reuniones entre quienes viven en el pueblo son habituales para conocer y conversar sobre sus evacuación y propuestas.
En La Cierva se encuentran censados en la contemporaneidad 35 vecinos y un total de 25 son los que asiduamente residen en el municipio. Christiana Scharfenberg ha reiterado su llamada a «disfrutar y utilizar las ventajas que supone existir en un pueblo como el nuestro, tranquilo. Este tipo de actos repercuten en nuestra tranquilidad y todavía nos ocasionan, como el destrozo de la señal del parque, unos gastos económicos totalmente evitables».