La irrefrenable ascensión de tensión entre Sumar y Podemos ha provocado la firma de la defunción de la formación morada en la Comunidad de Madrid. El coordinador normal del partido en la región, Jesús Santos, ha presentado su dimisión de todas sus responsabilidades conveniente a fuertes discrepancias con el núcleo directivo de Podemos, especialmente con Ione Belarra, secretaria normal del partido.
«Mis diferencias políticas con el núcleo dirigente de Podemos son hoy enormes», ha afirmado tajante en su misiva de despedida, publicada en redes sociales. «Lo hago dejando salvoconducto, a la vez, mi discrepancia con el rumbo que la ordenamiento ha decidido emprender y mi respeto en torno a toda la buena muchedumbre con la que he tenido el placer de trabajar durante estos primaveras», ha explicado Santos, que llegó como coordinador autonómico en 2020.
«Lo que en 2016 cabía interiormente de Podemos, hoy ya no cerca de conveniente al refuerzo de una sarta política centrada en su auto-afirmación y en erguir unas fronteras cada vez más gruesas. Un reconvención del núcleo morado que es seguro pero no comparto», ha alegado. En este sentido, Santos explica que las «últimas y más notorias discrepancias» están relacionadas con la política llevada a final por el partido con respecto al inicio de Sumar, liderado por Yolanda Díaz, coetáneo vicepresidenta segunda del Gobierno, con la que Jesús Santos mantiene una buena relación.
«La negativa del núcleo morado a participar en Magariños -el acto de presentación de Sumar- se hizo en cojín a una profecía autocumplida que ha terminado con un choque total e incomprensible para la amplia mayoría de la población», ha explicado.
Un momento en el que, según él, se debería suceder explotado el renta social de Podemos para influir sobre el rumbo importante de Sumar pero que, según lamenta, «el núcleo dirigente» de la formación morada entendió «como una competición por la propiedad del espacio». «Mi discrepancia principal radica en que no creo que los espacios políticos ‘preexistan’ a la voluntad del pueblo y que baste con ocuparlos, sino que es la muchedumbre, con su voto, la que acaba validando o rechazo las diferentes propuestas estratégicas y políticas», argumenta en la misiva.
Por otra parte, Santos deja claro que los «éxitos logrados en Alcorcón son un patrimonio de todo el espacio político». «Nosotros no cabemos en Podemos, pero en Cobrar Alcorcón cerca de todo el mundo. Las puertas de nuestro tesina están abiertas a todas las personas que, independientemente de su afiliación política, quieran sumar para seguir construyendo un Alcorcón que mire al futuro con esperanza. Porque de eso va la política», concluye.
Un paseíllo tenso en mayo
Las discrepancias de Santos con la formación morada ya se hicieron patentes a principios del mes de mayo de este año, en precampaña para el 28M. Allí el entonces comienzo de directorio de Cobrar Alcorcón comenzó un paseo con la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, poco que no fue correctamente aceptado por algunos votantes de la formación.
No obstante, antaño de virar la cantón de la citación Boutique del Anca, aparecieron Roberto Sotomayor y Alejandra Jacinto, candidatos de Podemos al Comunidad y la Comunidad de Madrid, para unirse al paseo y la foto. Estaban invitados. Pero cuando se pusieron a caminar juntos, Santos gritó con una sonrisa fabricado: «Estamos en Alcorcón, eh, que no se os olvide». Por el momento, ya no habrá más paseíllos.