La implantación del distrito único educativo en la Comunidad Valenciana anunciado por el Gobierno autonómico de Carlos Mazón, con el fin de matar con las imposiciones catalanistas y la discriminación del castellano en las aulas, ha topado ahora con la concurso de un comunidad socialista en la provincia de Alicante, el de la ciudad de Elda.
Aunque se prostitución de un municipio de predominio claro de población castellanohablante, tanto el equipo de gobierno municipal como la Agrupación Circunscrito de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos han mostrado su rechazo a esta medida por entender que propiciará la creación de «guetos».
A pesar de que cada tribu elegirá así independientemente el centro educativo para sus hijos, una fórmula que en la ejercicio hace además que el colegial estudie en el idioma que quiera, sobre todo, para respaldar su derecho a memorizar en la tierra materna, la concejal de Educación, María Gisbert, ha preparado de las «consecuencias negativas» del distrito único.
Los enseres indeseados -a cordura del equipo de gobierno regional del corregidor Rubén Alfaro- son «el aumento de las ratios», así como «la aparición de desigualdades en el número de solicitudes de matriculación, lo que genera centros de moda y centros denostados, un desequilibrio en la población escolar», o además «la imposibilidad de respaldar la cercanía del centro educativo» al domicilio descendiente y un «desajuste del clima de convivencia».
Desde la Agrupación Circunscrito de AMPAS de Elda además han registrado a una «veterano desigualdad» e incluso al «cerrojo de centros» según la demanda de matriculaciones, en palabras de su presidente, Carlos Vicente.
A su cordura, «esta política educativa, por experiencias anteriores, favorece fundamentalmente a los centros privados concertados y fondo una gran dificultad para distribuir en centros cercanos a su domicilio a la población escolar ‘nouvinguda’»
Por todas estas razones, han comunicado a la Conselleria de Educación su solicitud de ampliar el periodo de consulta y que sean los consejos escolares municipales quienes se pronuncien acerca del distrito único.