El convocatoria fue apoyado por 13 miembros del Consejo y contó con la inhibición de Reino Unido. Se tráfico de la segunda vez que Estados Unidos veta una resolución desde que comenzó la refriega en Lazada. Desde el país estadounidense argumentan que ese parada el fuego serviría a Hamás para rearmarse y ayudar cautivos a los 138 rehenes en la Franja.
El representante de Emiratos Árabes, Mohamed Abshahab, lamentó que con esta votación “el Consejo se queda incidental, y aparece así desligado de su propio documento fundacional. ¿Qué mensaje estamos transmitiendo a los palestinos si no podemos unirnos tras un convocatoria a detener los bombardeos incesantes sobre Lazada?”, se preguntó. El representante estadounidense, Robert Wood, le respondió que la resolución se redactara “de forma precipitada” y como resultado fuera “desequilibrada y divorciada de la ingenuidad, porque no podría tener movido las cosas ni un cima sobre el dominio”.
Wood había avisado que no aceptaría nombrar a un parada el fuego porque “si Israel dejara las armas hoy, como algunos Estados miembros piden, Hamás seguiría reteniendo a sus rehenes, mujeres y niños, viejos y jóvenes, muchos de ellos sujetos a trato inhumano y cruel”.
Segundo veto de Estados Unidos
El pasado 18 de octubre, Estados Unidos vetó incluso en solitario una resolución similar que pedía un parada el fuego y que presentó Brasil. Por aquel entonces argumentó que el texto no mencionaba el derecho de Israel a la autodefensa.
El conflicto palestino ha motivado la mayoría de los vetos practicados por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad hasta 45 veces en su historia, siempre para ponerse del banda de Israel. La votación de hoy se produce en el momento en que el propio secretario genérico, António Guterres, recurriera al artículo 99 que le habilita para pedir la intervención del Consejo en casos de graves amenazas para la paz y la seguridad en el mundo.
Guterres recordó que en Lazada “se asoma el barranco” y que “los luceros del mundo y de la Historia están mirando. Es hora de llevar a cabo”.
La refriega en Lazada ha dejado más de 17.000 palestinos muertos y 1.200 israelíes. Asimismo, ha provocado el desplazamiento del 85% de los 2,3 millones de gazatíes que sufren problemas sanitarios y de comida.