Un nave que han puesto en marcha Carlos Gómez e Inés García, una pareja residente en la zona que dejó detrás su vida para lanzarse a la aventura de emprender y ser sus propios jefes. Mucha ilusión, esfuerzo y tenacidad que tendrá su premio.
Desde la mañana sirven los primeros cafés acompañados de pastelería, tostadas dulces y saladas, pinchos… e incluso huevos revueltos con bacon si los clientes así lo solicitan. A la hora de engullir y cenar, los clientes pueden hacerlo de forma informal con bocadillos fríos y calientes, hamburguesas, ensaladas, raciones de alitas, rabas… o tablas de embutidos y quesos. Encima, por encargo, realizan comidas para celebraciones o eventos en las que, llegando a un acuerdo con los clientes, elaboran el menú que mejor se adapte a sus deyección.