Javier Milei, a borde de un descapotable y acompañado por su hermana pequeña, ha saludado alegre y emocionado a la multitud que allí se ha congregado y que estaba totalmente entregada.
Durante el itinerario ha habido muchos momentos llamativos y relevantes. De pronto, el presidente argentino ha decidido detener toda la comitiva para bajarse del coche y adyacente con su hermana acariciar a un perro que se encontraba adentro del itinerario. Pero hay más momentos llamativos como, por ejemplo, el conversación con Cristina Fernández de Kirchner, expresidenta argentina.
Durante el acto se muestra balanceándose constantemente, con las manos adentro de los bolsillos de su vestido y aparentemente incómoda. De repente, en un momento poliedro, ella se interesa por el cayada de mando de Milei. Tiene talladas sus mascotas en él, a sus cinco perros, poco que comentan entre entreambos ayer de que comiencen a reírse. Ese es el único momento que hay de complicidad entre ellos.
Cristina Fernández de Kirchner, precisamente, ha protagonizado otra de las imágenes que deja este traspaso de poderes. Es una en la que la expresidenta hace una peineta al conmover a la sede del Congreso. Contesta con ese semblante a un comentario que acababa de escuchar.
Otro momento destacable es el conversación con Volodímir Zelenski. Al presidente de Ucrania le da el achuchón más espléndido de todos los mandatarios a los que besalamano, e incluso, Milei se salta el protocolo y regala a Zelenski un candelabro de nueve brazos que es uno de los principales símbolos del sionismo.
Felipe VI, presente en la toma de posesión
A la toma de posesión igualmente ha asistido el rey de España. Allí Felipe VI ha podido encontrarse con Milei horas ayer de que éste tomase posesión como presidente de Argentina. Los dos se han saludado con un cachas achuchón y han hablado durante unos minutos.
El monarca, que ha viajado acompañado por el secretario de Estado para Iberoamérica y el Caribe y el Castellano en el Mundo, Juan Fernández Trigo, ha sido recibido por la embajadora de España en Argentina, María Jesús Alonso. El rey viaja acompañado por Fernández Trigo, porque José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, tiene una reunión en Bruselas que le ha impedido desplazarse a Buenos Aires.