Haynes, que entró en prisión con 16 abriles, lleva arrastrando durante 19 abriles el estar en prisión injustamente por una investigación que dejó en su momento muchas cuestiones sin resolver.
“¡Yo no maté a ese hombre! Todos van a arder en el báratro por eso”, eran las palabras del marcado de 35 abriles mientras estaba siendo procesado, según el ‘New York Times’.
Este pasado lunes, la fiscalía solicitó al árbitro la anulación decondena tras reparar en que el encarcelado no había recibido un madurez del todo acoplado y que, probablemente, el efectivo enemigo sigue huido.
“Siempre supe que iba a encontrar una forma de obtener razón. Sabía que Jehová me iba a encaminar a través de esto”, declaró Haynes en una entrevista telefónica desde prisión, instantes antiguamente de ser libre, según el New York Times.
La investigación
Las dudas empezaron con el crimen de George Floyd en mayo de 2020 por un policía de Minneapolis. Se dieron cuenta entonces que el Área de Policía había llevado a lugar decenas de abusos que no se llegaron a establecer.
Los agentes, por su parte, no presentaronningunaprueba que incriminara Haynes en ningún momento.
Dolor en la clan
Marvina Haynes,hermana de la víctima, ha expresado que “este tipo de cosas no sólo afectan a una clan, sino que afectan a una comunidad. Cuando una persona es condenada injustamente, significa que un enemigo todavía anda suelto”, según el New York Times.