Fue el 25 de abril de 2022, casi tres meses a posteriori de que apareciera el occiso de Esther López, cuando el principal sospechoso de su asesinato encaró su testimonio en presencia de la mediador que instruye en caso. Entonces insistió en que no sabía qué le había podido ocurrir y que él -que fue el extremo en verla con vida- la había dejado adjunto a la N-122 en Traspinedo (Valladolid) con humor de irse de fiesta. No lo hizo. Esa sombra la pipiolo de 35 primaveras fue arrollada por un transporte y acabó falleciendo unas horas a posteriori. La Escolta Civil tiene claro que el que fuera su amigo la atropelló en una «arrebato en caliente», según recoge el referencia final de investigación en presencia de el que este viernes Óscar S. M. volverá a ser interrogado en un día crucial en el que sus respuestas determinarán si sale esposado o de nuevo en independencia.
La recorrido se dilación tensa. La tribu de Esther López ha convocado una protesta a las puertas de los juzgados coincidiendo con su testimonio. Se tráfico de la cita mensual que sus seres queridos mantienen en Traspinedo cada mes desde que desapareció y que en esta ocasión trasladan a Valladolid a unos metros de quien tienen claro que «asesinó» a la pipiolo para que «nos oiga y diga la verdad». No se dilación que puedan cruzarse con Óscar, que ya en la mencionado ocasión fue conducido directamente en coche a las instalaciones y que esta vez ha solicitado -y se le ha sido concedido- un dispositivo que vele por su seguridad a cargo de la Policía Franquista.
El posicionamiento de los teléfonos móviles -juntos y sin cobertura al mismo tiempo tras haberse supuestamente separado-, la manipulación del ordenador de a costado de su transporte -él lo niega pero un referencia señala que se hizo en dos ocasiones- o el lavado del transporte al día próximo -Óscar rechaza este extremo y la Escolta Civil se aferra a las imágenes «mejoradas» de las cámaras de seguridad-. Son algunas de las supuestas contradicciones que la Guardia Civil recoge en el referencia en el que le señalan como responsable del atropello y por los que Óscar será interrogado por las partes -al frente del empleo conocido estará la fiscal principal de Valladolid tras el traslado del compañero que llevaba el caso-. Tiene derecho a no decidir o contestar sólo a alguna de ellas sobre los indicios surgidos con posterioridad a su primer declaración y por las cuestiones que entonces dijo no memorizar «explicar».
Desde la incriminación particular que ejerce la tribu de Esther se dilación que cambie la situación procesal del principal sospechoso -otras dos personas fueron investigadas en la causa pero su implicación ya ha sido descartada-, cuyo ingreso en prisión han solicitado en varias ocasiones siendo descartado por Fiscalía y mediador, que entendían que pese a los indicios no había «relato».
En esta ocasión, con el referencia final de la investigación tienen uno sobre la mesa, el de la Escolta Civil, que fue remitido hace un mes y que adjunto con el interrogatorio de hoy podrían conducir o no a dar forma a una incriminación por crimen, por homicidio por imprudencia, por omisión de socorro… O, por el contrario, no se consideran suficientes los indicios. Todavía hoy deberán pronunciarse las partes sobre si procede conciliar una nueva prórroga de la investigación procesal -el plazo vence en enero-.
En concreto, las conclusiones de la Escolta Civil apuntan a un crimen en el ámbito de una discusión entre entreambos -él mismo señaló que ayer de descabalgar Esther del coche se enfadaron-. El Instituto Armado considera que fruto del conflicto se «pudiera suceder desencadenado un episodio violento» y una supuesta golpe que justificaría las lesiones que ella tenía en el párpado o el cuello. Tras ello se habría producido el supuesto atropello -por un transporte compatible con las características del Volkswagen T-Roc de Óscar- a velocidad media o muerto y de espaldas a la víctimas, que no falleció en el acto, sino horas a posteriori y que de acuerdo con el referencia habría tenido opciones de sobrevivir de suceder sido atendida.
Un atropello que sitúan en las inmediaciones de la vivienda común del principal sospechoso, quien según la exposición de la Escolta Civil habría trasladado supuestamente a posteriori el occiso de Esther a la cuneta en la que fue contrario, donde su cuerpo tienen claro desde la investigación que se dispuso en ese circunstancia como una «teatralización».
Allí fue encontrada un 4 de febrero de 2022, un total de 24 días a posteriori de que se le perdiera la pista en la orto de 12 al 13 de enero, cuando tras una sombra con amigos se subió al coche de Óscar. Lo hizo en compañía de una tercera persona, que se bajaría del transporte a montar a su casa, y dejaría a solas a Esther y Óscar a costado del T-Roc.