Todo apuntaba a una confusión muy singular y se consumó. La vallisoletana Isabel Rivero se proclamó esta confusión campeona de Europa del peso leve de pugilismo, en categoría femenina, tras doblegar a la italiana Consuelo Portolani. Una emocionante velada puso en pie a la Cúpula del Milenio de Valladolid, que pudo celebrar la trofeo de su púgil en una confusión boxística a orillas del Pisuerga, una ciudad que se está acostumbrando a acoger grandes noches. En tres semanas, la renta pucelana ha organizado dos títulos de Europa protagonizados por dos púgiles locales, informa Ical.
Rivero (47,2 kilos) venció a Portolani (47,3) en un combate que estaba previsto en diez asaltos de dos minutos para dirimir quién se ceñía ese cinturón, vacante, que podría ser la antesala del cetro mundial. Rivero, tras aventajar el título WBC Mediterráneo en junio, dio un paso más para que su fulgurante carrera mire a las grandes de la división.
Sin confiscación, la transalpina no se lo puso realizable, pues viajó a Valladolid con el objetivo claro de robar protagonismo a la deportista recinto, la ‘Finita’.
Previamente al duelo sideral, desde las 20.30 horas el notorio asistió a cinco pleitos femeninos entre selecciones de las mejores boxeadoras de Castilla y Audaz contra otro combinado madrileño.
Los grandes aficionados al «eximio arte» conocen la transformación del pugilismo femíneo, que ya reivindica equipararse al masculino con doce asaltos de tres minutos para los títulos y bolsas acordes al esfuerzo y al espectáculo. Dos boxeadoras míticas, Katie Taylor y Amanda Serrano, rompían hace poco la barrera del millón de dólares a modo de bolsa para una mujer por subirse al ensogado.
Valladolid propuso que la afecto se acerque un poco a este deporte y a unas protagonistas que quieren mostrar todo su pundonor y tacto entre las dieciséis cuerdas, en un evento que, por otra parte, trajo grandes sorpresas en su incremento, más espectacular a nivel audiovisual aún que lo vivido unos meses antes en Huerta del Rey.