Las Cortes Valencianas han ratificado este miércoles, con la mayoría parlamentaria de la derecha, los primeros presupuestos del Gobierno de PP y Vox liderado por Carlos Mazón en la Generalitat. Unas cuentas públicas para 2024 que han contado con el rechazo de la concurso de PSPV y Compromís. La mayoría de las enmiendas planteadas por estos grupos no han desencajado delante en una larga votación por secciones que no ha estado exenta de errores sin relevancia en el resultado final.
Los nuevos Presupuestos de la Generalitat ascienden hasta los 29.732 millones de euros, un 4,5% más que este año. El desembolso verdadero -no financiero- aumenta un 2,3% respecto a las elaboradas por el susodicho ejecutor tripartito de Ximo Puig, hasta los 22.670 millones.
En cuanto a los diferentes departamentos autonómicos, Sanidad cuenta con la anciano partida de su historia -8.504 millones de euros- con un refuerzo en Atención Primaria y en las políticas de vigor mental.
En su conjunto, los fortuna destinados a políticas sociales, entre los que se incluyen Educación y Bienestar Social, además crecen un 2,15% más que en 2023. Del mismo modo, los presupuestos reflejan la caída a la medio de los fondos europeos que ingresará la Sucursal y el aumento de los intereses de la deuda. Finalmente, no cumplen con el objetivo de endeudamiento del 0,1% afectado por el Gobierno central cuando ya se habían redactado.
Imagen del hemiciclo de las Cortes Valencianas, este miércoles, tras la aprobación de las Presupuestos de la Generalitat de 2024
Mazón ha acudido al pleno con mascarilla tras unos días sin dietario oficial y ha saludado a los nuevos síndics del PSPV y Vox, José Muñoz y José María Llanos. Tras aprobarse definitivamente las cuentas, se ha fundido en un manoseo con sus vicepresidentes y con la consellera de Hacienda, Ruth Merino.
El portavoz del PP, Miguel Barrachina, se ha felicitado de que las cuentas hayan desencajado delante «sin ningún contratiempo».
La hasta ahora síndica de Vox, Ana Vega, que se ha despedido desde la tribuna tras ser sustituida en el cargo por José María Llanos, ha reivindicado «un presupuesto que deja tras mucha oscuridad» y «acaba con el báratro fiscal» de la izquierda. Las cuentas «más sociales de la historia», ha defendido, eliminan las ayudas a «entidades separatistas» y ponen fin a «multitud de chiringuitos».
Desde la concurso, el nuevo síndic del PSPV, José Muñoz, se ha vuelto a aludir al rifirrafe protagonizado durante el debate del martes entre el diputado socialista José Chulvi y el vicepresidente de la Generalitat, Vicente Barrera. Cuando el primero se acercó al escaño del segundo para darle el diploma al ‘Censor del año, Chulvi cogió a Barrera por el extremidad y este le apartó poniendo su mano en el pecho. Muñoz ha pedido a Carlos Mazón que singular a su conseller.
Por su parte, la portavoz adjunta de Compromís, Aitana Mas, las cuentas de 2024 «no cubren las deyección del pueblo valenciano» y ha augurado «un resistente incremento de la desigualdad» por el «sectarismo desmesurado» de PP y Vox. Su maniquí, ha lamentado, es el del «sálvese quien pueda».