Los barones, sin Ayuso y Mazn, se renen en Pontevedra para lanzar la investidura de Feijo: “El prximo Gobierno ser del PP”


  • Entrevista Alberto Núñez Feijó: “Si renunciara a lo que va a renunciar Sánchez, sería presidente”
  • política La mayoría cree que Sánchez será presidente pero que los nacionalistas debilitarán su gobierno

“Estoy convencido de que ahora, o más tarde, el próximo gobierno en España será el del PP”. Como seguro de su proyecto y de su juego, Alberto Núñez Feijóo se ha mostrado este domingo. Un mes después del debate de investidura más complejo al que se ha enfrentado hasta el momento el Partido Popular, su líder ha abierto el nuevo rumbo político rodeada de sus barones territoriales salvo los de Madrid, Valencia, Cantabria y La Riojacon el convencimiento de que será el año en el que asuma la presidencia del Gobierno.

Feijó regresó a su tierra y a un lugar marcado por el simbolismo para el PP, el castillo de sotomaior quien rehabilitó Mariano Rajoy siendo presidente de la Diputación Provincial de Pontevedra, para iniciar una frenética cuenta atrás para conseguir la investidura. Para ello se ha rodeado de su núcleo duro y del grueso de los barones territoriales, juanma moreno, Alfonso Fernández MauecoFernando lópez miras, María Guardiola, Jorge Azcón y Marga Prohens.

Significativas fueron, sin embargo, las ausencias de los presidentes regionales de dos de sus principales fortalezas, Madrid y Valencia, Isabel Díaz Ayuso y Carlos Mazónasí como los dirigentes de Cantabria y La Rioja, María José Senz de Buruaga y Gonzalo Capellán. En su ausencia, contó con el apoyo del ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy y de miembros del Comité Director Nacional, Borja Semper cualquiera Cuca Gamarra.

Para saber mas

Feijó quiso hacer una demostración de fuerza y ​​salió redonda, con una seguridad en su proyecto político que no le hace ignorar que la inauguración de las jornadas 26 y 27 de septiembre puede fracasar a falta de cuatro apoyos que sumar a la 172 ya garantizado. En cualquier caso, “aunque no se trata de una investidura a corto plazo, sí será la primera piedra del próximo Gobierno de España”.

Núñez Feijó iniciará esta semana una ronda de contactos para garantizar la investidura que le han encargado Felipe VIreuniéndose “con los grupos políticos que quieran hablar” y “con todos los presidentes autonómicos que quieran aportar”, con la intención de ser “el presidente de todos los españoles y no el presidente de unos españoles en conflicto con el resto”.

Como premisa, ya advierte: “No admitiremos subastas para apaciguar los intereses particulares de las minorías”. Y anuncia su intención de que “se acabe el tiempo en el que se silenciaba a los que no pensaban como tú”, con una línea roja de no caer en el “abismo político, territorial, económico y existencial” ni en los “cuatro grandes cometidos”. que alejan al presidente Sánchez de la investidura”.

las asignaciones

La amnistía “contraria a la Constitución”, el referéndum de independencia “impropio de una de las naciones más antiguas del mundo”, el gobierno “más débil que quizás España pueda tener” formado por 24 partidos y “volver a romper el principio de igualdad” de todos los españoles son, para Feijó, esos cuatro encargos. Y que el PP consiga los cuatro votos que le faltan para garantizar la investidura “no será bueno para el PP, sería bueno para España”, alejándose de esas cuatro amenazas.

Defensor del diálogo frente a la “imposición” y del “acuerdo de valores compartidos” frente al “acuerdo de cesión y chantaje”, defendió Feijó ante 1.500 cargos y militantes del PP y ante su sustituto en Galicia, Alfonso Rueda, que “la política habla” y que “el acuerdo de investidura pasa por hablar con quien quiere hablar”. En estas próximas semanas se dedicará a “hablar, sí; dialogar, también; pero chantajear, no; subastas, no; someterse a lo que quieren las minorías, no”.

Deseoso de “volver a esa España cordial que ha hecho una transición ejemplar”, Feijó presentó en Soutomaior las “líneas maestras de la investidura en cumplimiento del mandato del Jefe del Estado”, e insistió en que, para esta investidura, tiene ” lo más importante”, la “legitimidad de haber ganado las elecciones”, aunque quiso aclarar que “quienes las han perdido aún no las han aceptado”.

Simbolismo de Soutomaior

Este complejo curso político comienza en un lugar marcado por el simbolismo, ya que el PP regresa este año al Castillo de Soutomaior, su tradicional emplazamiento para esta cita de finales de verano desde 2007del que fue “exiliado” hace siete años cuando el bipartito PSOE-BNG asumió la Diputación Provincial y prohibió actos políticos en el recinto, exiliado al municipio de Pontevedra, también en Pontevedra. Cerdedo-Cotobade.

El presidente del PP y de la Diputación de Pontevedra, luis lópez, Lugus, lo calificó como un “acto de restitución de la libertad, de la justicia” porque “se recupera para la ciudadanía el Castillo de Soutomaior”. El propio Feijó aplaudió este regreso porque supone que el partido ha puesto fin al “gobierno provincial más sectario de la democracia”, en alusión al anterior bipartito, presidido por el presidente del PSOE gallego y actual senador. Carmela Silva“un ejemplo de sectarismo que tenemos que eliminar de la vida política”.

En este regreso, tanto el horario como la duración del acto estuvieron condicionados por uno de los usos fundamentales de este recinto: la celebración de eventos. Dos horas después del inicio de la cita popular se estaba celebrando una boda y el escenario del PP tuvo que ser desmontado a toda prisa para garantizar su celebración.

“regeneración institucional”

“Es mejor perder la investidura y que España no pierda”, ha insistido Feijó, quien ha avanzado que en su discurso de investidura en el Congreso presentará una batería de propuestas económicas y de “regeneración institucional”. “Si la investidura sólo depende de ceder más, de ceder a los que quieren salir de España, de humillar a las instituciones, esa investidura la ganará Sánchez, pero España la perderá”, ha dicho.

Feijóo intentará esa investidura, pero no “a cualquier precio” porque quiere ser “un presidente libre y no secuestrado para poder nombrar el Consejo de Ministros y estar al servicio de España y no por ambición personal”. Similar fue el argumento esgrimido por el presidente de la Xunta, convencido de que no cederá al chantaje de “nacionalismos excluyentes y egoístas”.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *