Por qué el año que viene no será el 2024, según los historiadores



En una semana entraremos en el año 2024 posteriormente de Cristo, o eso es al menos lo que pensamos. Varios historiadores habrían concluido que Dios no habría nacido hace 2024 abriles, sino que esta sigla se debería a un error de cálculo.

Al parecer, algunos grupos cristianos de la época habrían tomado como relato original otros eventos de la historia para ‘comenzar’ su calendario, como puede ser el año en el que se fundó Roma, las Olimpiadas o simplemente apoyarse en los cónsules o emperadores romanos…

Sin retención, cuando el cristianismo se estableció en el Imperio, los cristianos habrían decidido tomar como inicio del calendario la data en la que nació Jesús, según explica Lorena Pérez, profesora de Historia de las Religiones en la Universidad Carlos III. Por ejemplo, el mismo ermitaño Dionisio el Exiguo llegó a la conclusión de que Dios había nacido el 25 de diciembre del año 754 a.u.c. (ab metrópoli condita, desde la fundación de la ciudad de Roma). De esta guisa, los romanos terminaron elaborando un sistema que comenzaba el año en que Rómulo fundó Roma, por lo tanto, el año 100 a.C. era el año 653 a.u.c.

Error de cálculo del ermitaño Dionisio

El ermitaño Dionisio, propuso entonces que ese llamo pasa a ‘llamarse’ 1 a.D. (anno Domini, año del señor), es asegurar, el año 1 del Señor. No obstante, esta teoría, que podría ser válida, contrasta con lo que se dice en la Antiguo Testamento, esta dice que Dios nació durante el reinado de Herodes, rey de Judea que murió en el año 750 a.u.c. (4 a.C.)

No obstante, en el siglo XVII, a pesar de que matemáticos y científicos manejaban proporcionadamente los números arábigos, ya extendidos en la época, no lo hacían así los historiadores. Entonces, estos ‘impusieron’ la costumbre de que el año antecedente al ‘1 a.D, el año 753 a.u.c., pasara a ser el año 1 antaño de Cristo, en siglas 1 a.C., tras el cual venía el año 1 a.D o, equivalentemente, el año 1 d.C. (año 1 posteriormente de Cristo)’, según recoge la web de la Universidad de Valencia.

No hay año cero

En recapitulación, el año cero no existe ni en el calendario gregoriano ni en el juliano y esto puede soportar a mil equívocos. Por esta razón, la Universidad de Valencia pone un ejemplo en su artículo en la web: ‘Por ejemplo, si la temperatura pasa de 4 grados bajo cero a 4 grados sobre cero el aumento ha sido de 8 grados, pero entre el año 4 a.C. y el año 4 d.C. no han transcurrido 8 abriles, sino sólo 7 (porque desliz el año 0), pasa lo mismo si hablamos de los abriles 750 a.u.c. y 757 a.u.c’.

Un supuesto error de cálculo habría generado que internamente de unos días pasemos al 2024 cuando en ingenuidad sería el 2025.

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