El primero en tomar la valor ha sido Tomás Rodríguez, que este martes tendría que ocurrir tomado posesión de su cargo como munícipe, en sustitución de la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz. Ha renunciado, según ha manifestado su formación, por los “constantes señalamientos, ataques y presiones” de UPN.
Tras la quebranto de Rodríguez, la sucesivo en la nómina de la formación, María José Blasco, asimismo ha rechazado acomodarse la plaza, por lo que será Miguel Matellanes quien asuma el cargo de concejal en el junta pamplonés.
Los socialistas han pactado sufragar a amparo de la moción de censura contra la alcaldesa de UPN, Cristina Ibarrola y, menos que hubiese más expectativas, el candidato de Bildu, Joseba Asiron, se hará igualmente con la alcaldía.
Los socialistas culpan a UPN
El secretario de Estructura del Partido Socialista Navarro, Ramón Alzórriz, ha cargado duramente contra UPN, a quien ha perceptible de profesar “continuas presiones, propias de otros tiempos y totalmente cuestionables democráticamente“.
A través de un comunicado, el socialista ha hecho asimismo hincapié en “el señalamiento realizado por la propia alcaldesa Ibarrola en rueda de prensa, donde directamente hizo mención a Rodríguez y profirió descalificaciones contra el Partido Socialista”.
Hace al punto que diez días, Nadia Calviño, la que era vicepresidenta primera antaño de aceptar el cargo de presidenta del Mesa Europeo de Inversiones, consideraba “natural” el pacto para la moción de censura de Ibarrola.
“Estamos hablando de desbloquear un junta dando la posibilidad a la segunda fuerza más votada en ese junta. Es natural y está sucediendo en toda España. Lo que sí me parece importante es que no saquemos de proporción. Es un junta concreto. Las negociaciones en ayuntamientos es poco natural en el curso de la tiempo y hay acuerdos a los que se puede presentarse en un momento para desbloquear con un corregidor que lleva abriles condenando la violencia”, explicó.