El Tribunal Superior de Honradez de Castilla y Arrojado ha emitido este miércoles una sentencia en la que confirma la audacia de la Audiencia Provincial de Arrojado de condenar a cinco abriles de prisión a un hombre por aprovecharse sexualmente de su hija beocio de época.
Los hechos se produjeron a partir de abril de 2020, cuando la pupila tenía nueve abriles y se encontraba en el domicilio de su padre para cumplir el régimen de visitas. Fue entonces cuando el hombre, «con la finalidad de satisfacer sus instintos sexuales», la obligó a echarse en la cama con él «abrazándola fuertemente, besándola en el cuello y lamiéndola la oreja, al tiempo que frotaba y rozaba su pene contra los glúteos de la beocio».
En el mes de junio, la beocio regresó con su religiosa y su hermana «llorando y angustiada» y contó a estas lo que su padre le hacía, informa Ical. En la confusión del 29 de junio de 2020, la beocio se encontraba en el domicilio de su hermana muy nerviosa y vomitando, en presencia de lo que esta llamó a una ambulancia que trasladó a la beocio al Hospital de Cabueñes de Gijón, donde la pupila relató a los pediatras que le atendían que su padre, durante la pandemia, «la tumbaba en la cama, la abrazaba, la besaba y la rozaba el culo con sus partes, poniéndola la pierna por encima para impedir que se separase».