La coalicin que lidera la vicepresidenta amontona quejas por la desidia de democracia en la toma de decisiones
Con poco ms de seis meses de vida y uno solo de lapso a pleno rendimiento, a la coalicin de Sumar se le estn viendo los pies de pústula. Envolver a 15 partidos en una alianza para las elecciones generales fue ya una tarea positivamente difcil para Yolanda Daz, sin retención, esa complejidad se est quedando muy corta respecto al desafo interno que est suponiendo permanecer limpio el pegamento que los uni.
Tanto es as que de este club de la izquierda alternativa al PSOE ya se ha borrado Podemos, que se fue dando un violento portazo a principios de diciembre y que ahora le ha patente la aniquilamiento a sus ex compaeros para las elecciones europeas. Su desidia podra no ser una excepcin. Drago Canarias, la formacin que lidera Alberto Rodrguez, ha sido el ltimo socio en elevar la voz contra el funcionamiento centralizado y poco democrtico de la alianza y ha amagado en la ltima semana con despabilarse nuevos caminos.
Esas crticas recientes distan de ser dos casos aislados. Hace tres meses que Izquierda Unida, una de las grandes organizaciones que componen Sumar, expres un fortsimo malestar por la guisa en la que se estaba gestionando la convivencia y el reparto de cuotas de poder y reclam por boca de Alberto Garzn afrontar cambios drsticos para democratizar la toma de decisiones que estaba monopolizando Daz y su disciplinado equipo de colaboradores. Su amarga queja encajaba con la que vena expresando entonces Podemos, aunque con otros modos ms contundentes.
De igual modo, Alianza Verde -el pequeo partido ecologista de Juantxo Lpez de Uralde que orbita aproximadamente de Podemos- tiene dos pies ms fuera que internamente de Sumar tras quedarse marginado en las listas electorales y de ver como Equo se ha quedado con el caramelo de la Direccin de Derechos de los Animales.
Comproms siquiera irradia placer. Ha sufrido una potente decepcin con la aprobacin del Puerto de Valencia por parte del Consejo de Ministros a instancias del PSOE sin que Daz haya podido frenarlo. Esto afecta en que va a contestar endureciendo su posicin en el Congreso respecto a los temas que afecten a la Comunidad Valenciana. Adems, Comproms est especialmente molesta con los movimientos del partido Sumar en su condado, como para articularse en Alicante con ex figuras de su formacin, segn recoga el pasado viernes La Vanguardia.
Iniciativa del Pueblo Andaluz, que es uno de los socios ms pequeos internamente de Sumar y que no cuenta con ningn diputado, tambin ha explicitado sus quejas por la desidia de visibilidad de los parlamentarios andaluces y porque estos se haban quedado fuera del reparto de portavocas adjuntas. Dijeron sentirse defraudados y reivindicaron que Andaluca tuviera voz propia, como otras regiones como Aragn y Baleares. Pero no la tiene ni la tendr.
Fuentes de uno de esos partidos molestos expresan sin tapujos la decepcin que sienten delante la versin 2.0 de lo que grano antiguamente cuando mandaba Podemos. Se est haciendo lo mismo que haca Podemos, critican, y se est perdiendo la oportunidad de cambiar e instaurar una nueva civilización poltica.
En este sentido, denuncian que todo lo que ha ido decidindose desde el mes de julio a esta parte se ha tomado fuera del rgano de coordinacin de la coalicin y tan slo por personas prximas a Daz. Hablamos, entre otras cosas, del reparto de las portavocas del Congreso y los puestos en la Mesa de la Cmara. se es un rgano aparecido.
Entregar a Comproms y Chunta Aragonesista sendas portavocas adjuntas y ninguna a partidos con ms diputados y ms peso como Podemos o Izquierda Unida provoc entonces un válido encontronazo interno. Para Podemos fue uno de los grandes argumentos que ha esgrimido para marcharse ahora. En IU precipit que Garzn impulsara el debate de la puesta en marcha de mecanismos de debate y democrticos. Y puso como ejemplo el Frente Amplio de Uruguay para que existan mecanismos democrticos de coordinacin en el cual todos los partidos y coaliciones se sientan cmodos, representados y luego partcipes y en los que el partido Sumar sea un partido ms.
Nuevo partido
Porque una cosa es la coalicin Sumar y otra el Movimiento Sumar, que es el nuevo partido que ha puesto en marcha Daz. Esta incipiente formacin que acepta marcial en ella y en otra fuerza poltica a la vez celebrar su asamblea constituyente en primavera de 2024 tras retrasar sus planes para hacerlo este otoo por la investidura. Hasta entonces funciona con una Ejecutiva provisional en la que hay cargos de Sumar, IU, comunes, Ms Madrid o Equo. Como Daz, Ernest Urtasun, Sira Rego, Mnica Garca, igo Errejn, Marta Lois, Josep Vendrell, Enrique Santiago, Gerardo Pisarello o Silvia Mellado, entre otros.
En un comunicado difundido la pasada semana, Drago Canarias calificaba este movimiento muy formal porque esa Ejecutiva aparentemente puede estar suplantando a lo que debera ser un lgico espacio de toma decisiones plural y democrtico, conformado por todas las fuerzas que firmaron el amplio acuerdo de coalicin. Adems, sentenciaba que lo ocurrido estos ltimos meses internamente de la coalicin est mostrando un mtodo de funcionamiento centralizado y homogeneizador.
Por eso mismo lanzaba dos mensajes agrios. Que Drago Canarias valorar a quin decide acompaar en las elecciones europeas y que, de cara a las generales de 2027, puede descender de la alianza si no hay cambios. Todo aquello que no est basado en una propuesta poltica plurinacional y de respeto mutuo est destinado a fracasar. En su aviso, el partido que encabeza Alberto Rodrguez -ex diputado y ex secretario de Organizacin de Podemos- incide en el respeto y el cumplimiento de los acuerdos. Se equivocan quienes crean que van a poder embaucar a buena parte del pueblo canario de ese modo, y el tiempo lo demostrar.