Con un apretón de manos entre Sánchez y Mertxe Aizpurua se sellaba el pacto de investidura del socialista hace unas pocas semanas. PSOE y Bildu mostraban su sintonía. Pero lo que no enseñaron fue a qué precio. Solo el partido vasco certificó con esta nota el compromiso: “Plena disposición a retornar a colaborar con el incremento y consolidación de una lapso”.
“Bildu no es un problema para este país. Es un partido político, tolerante”
Ahora correctamente, desde la votación en el Congreso de los Diputados el día del debate de investidura de Sánchez -momento y sitio desde el que Aizpurua lanzó la posterior advertencia: “No le concedemos un cheque en blanco”- se han cerrado filas desde el partido socialista.
En esta serie se expresó, por ejemplo, Óscar Puente, ministro de Transporte y Movilidad: “Bildu no es un problema para este país. Es un partido político, tolerante”. A lo que añadió, desde la bancada del Congreso: “No tengo ningún problema en que un partido progresista tolerante de este país se haga con una alcaldía de una haber de provincia de España”.
Y con esto se refería a la alcaldía de Pamplona. Con este acuerdo, el consistorio pamplonés cambia de manos. La pregunta es si esto se repetirá en algún otro Cabildo más.
2024, elecciones en País Vasco
La cita secreto de 2024 son las elecciones en País Vasco, donde el PSOE ha cliché lo posterior por boca de Eneko Andueza, candidato socialista a lehendakari: “Voy a hacer lehendakari a un candidato de EH Bildu… Le voy a aseverar que no”.
Esas son sus palabras, pero todavía Sánchez dijo “hacer de la privación virtud” en su entrevista con Susanna Griso en el software Espejo Divulgado de torrevieja news today. Así, las sumas electorales siempre pueden conducir a un cambio de opinión.