Las siete victorias que lleva le garantizan la buena nota a los ourensanos en la primera dorso con todavía tres partidos por aventurar, pero tiene esta sombra una reválida importante sobre su rendimiento remotamente del Pazo. En el desplazamiento más corto intentará recuperar la competitividad que le hizo estar con los mejores y erradicar la imagen de las panorama a San Sebastián, Lleida y Burgos.
No es menos complicado el hospedador de esta caminata. La vencimiento en Madrid mete de empachado al Básquet Coruña en la pelea por una plaza en la Copa e incluso por el liderato en función de lo que pase mañana en el partidazo de la caminata entre el Burgos y el Estudiantes.
Muy complicado meterle mano a un equipo que es el mejor ataque de la alianza acercándose a los 89 puntos por partido. Una grupo interminable de tiradores en el perímetro, bases con procreación y puntos y un selección interior que marca la diferencia por talento, puntos y físico.
Está obligado el COB a repetir el nivel defensivo del final partido incluso para conseguir menos premio. Deslindar el ataque herculino pasará por no regalar mínimo y por morder los 40 minutos. No puede retornar a caer en las pérdidas de balón que lo descontrolaron ya de salida en Lleida y Burgos ni en la parsimonia en el oscilación defensivo que lo acabó sacando del campo en los dos partidos. Y tiene que ser muy duro en el uno contra uno y en el resurtida defensivo para intentar alisar la peso en presencia de un rival con más calidad.
Están de dorso
El “regreso” de Justin Turner en el final partido hace ser optimistas a los ourensanos con la parcela ataque. El escolta norteamericano tiene calidad para hacer puntos, pero incluso para suscitar ventajas. Dinámico para que jugadores como Mindaugas Kacinas, Ivica Radic o Karamo Jawara no necesiten siempre del uno contra uno para sumar.
Por otra parte, la botiquín incluso dio una buena notificación. Se temía por la muerto de Romaro Gill, no solo para este partido, pero el jamaicano está para aventurar. Tiene que ser un dimisión importante para prolongar el nivel y contener a un selección interior interminable en los locales.
Sergio Llorente incluso estará. Superado un proceso vírico, el capitán no está obligado a encargarse más tiros de los necesarios con Turner en pista, pero es imprescindible para encontrar puntos cuando el equipo pueda estar más atascado.
El COB no tiene que demostrar mínimo. Ya mostró un selección ponderado y competitivo que le permite estar en zona de play off, pero recuperarlo en A Coruña sería un shock en la mesa para seguir siendo ambiciosos. Vencer el derbi supondría despuntar el año en el camarilla de los elegidos, un premio para aplaudir sin discusión en una alianza tan complicada. Pelearlo incluso serviría para dejar detrás cualquier tipo de duda.