El Defensor del Pueblo ha instado al Comunidad de Elche a que retire la cruz del Paseo de Germanías por entender que es un momento «contrario a la memoria democrática», mientras el equipo de gobierno municipal del corregidor popular Pablo Ruz ha anunciado que elabora un crónica procesal y técnico para mantenerla porque «no contiene vestigios franquistas».
En su argumentación, Querube Gabilondo alude a una resolución de la Conselleria de Billete, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática con aniversario del 9 de noviembre de 2022, cuando gobernaba la Generalitat Valenciana el PSPV-PSOE en coalición con Compromís y Podem. De hecho, este asunto arranca de una queja presentada por el conjunto municipal socialista ilicitano, que encima aprobó ya un tesina para quitar la cruz cuando ostentaba el poder en la ciudad en la mencionado asamblea.
No obstante, el coetáneo gobierno regional -del PP y Vox- rechaza la idea porque el monumento es «un símbolo de concordia», que no «referente a la dictadura», por lo que mantiene su intención de conservarlo adentro de las obras de reforma de toda la plaza en la que se encuentra.
En cambio, para el Defensor del Pueblo, «el hecho de que el monumento no tenga ninguna inscripción no excluye de forma cibernética que tenga un significado contrario a la memoria democrática, pues, como es obvio, los propios rudimentos arquitectónicos pueden tenerlo por sí mismos sin escazes de evidenciarlo con una placa o una inscripción».
Asimismo, justifica su postura en que se construyó en 1944 «y no suscita el consenso social necesario que permitiría en el espacio manifiesto», encima de mencionar un manifiesto firmado por 60 profesores de Historia. En su réplica en un comunicado, el Comunidad señala que «ha permanecido en los 45 abriles de democracia en España y con el paso de los gobiernos municipales de diverso color político».