Nuevos daños en el canal de Aguamansa amenazan el suministro de agua en Tenerife


A medida que el riesgo de incendio disminuye, el incendio forestal en Tenerife Sigue causando daños en sus últimos coletazos, con focos calientes y desprendimientos de tierra que han vuelto a provocar una avería en el canal de Aguamansa, el sistema de abastecimiento de agua del norte de la isla. Así lo ha avanzado la consejera insular de Medio Natural, Blanca Pérez, quien lo ha valorado como «malas noticias» dentro de la buena evolución del incendio hacia su control.

Los desprendimientos son parte de las últimas consecuencias del incendio en Tenerife, que ha provocadouna nueva ruptura del Canal de Aguamansa durante la madrugada de este martes. Este sistema abastece de agua desde Santa Úrsula a parte de El Rosario, y a zonas de Santa Cruz y La Laguna.

El canal de Aguamansa fue afectado hace una semana y su reparación tardó varios días al encontrarse dentro del perímetro del incendio. Tras recuperar el 100% del suministro, el incendio ha vuelto a afectar a esta instalación, por lo que ahora parte de la isla podría verse afectada afectó su servicio. El Rosario ha sido uno de los municipios más afectados por los cortes de agua, que ayer lunes se recuperó al 100% en el suministro de agua a la población y al centro penitenciario de Tenerife II.

Las reactivaciones han obligado también a desalojar 7 viviendas en los altos de Santa Úrsula, una decena de vecinos de la zona del mirador de La Atalaya que han tenido que regresar a abandonar sus hogares temporalmente por estos puntos calientes que se resisten al control. Los cuerpos de bomberos siguen con especial atención el último frente a neutralizar, situado en Güímar, con lo que el fuego avanza a su fase controlada.

Este incendio es ya el tercero en Canarias por número de hectáreas afectadas este siglo, con 14.751 hectáreas distribuido en doce municipios (La Orotava, Candelaria, Arafo, Santa Úrsula, Los Realejos, Güímar, La Victoria, El Rosario, El Sauzal, Fasnia, Tacoronte y La Matanza) y un perímetro de 90 kilómetros. En la operación de extinción han participado 22 aviones, hasta el momento, un total de 7.277 vertidos en los que se han utilizado 13.103.700 litros de agua, y más de 600 efectivos terrestres entre equipos de intervención, seguridad, logística y voluntarios. .

Más de 13.000 personas fueron evacuadas a lo largo de los días que duró la lucha más intensa contra el incendio, de las cuales 1.300 hicieron uso de los 10 refugios habilitados por los ayuntamientos. Asimismo, 473 animales fueron acogidos en diferentes centros.

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