El concejal de Ortega Smith ha sido reprobado por PP, PSOE y Más Madrid, en un pleno en el que no ha faltado la tensión pese a la mecanismo en la crítica al comportamiento del munícipe de la formación de Santiago Abascal. PP, PSOE y Más Madrid han coincidido en que Ortega Smith «se pasó de frenada» al lanzarle una botella vacía al concejal de Más Madrid Eduardo Rubiño. Pero aunque el tema central del colisión era la acto de Ortega Smith, siquiera han faltado otras críticas cruzadas: del PSOE al PP por las manifestaciones de Ferraz, del PP al PSOE por el «pacto del Tinell» o los escraches; del PP a Más Madrid porque «fue con ustedes con quien entró la violencia a la política y a las instituciones». El corregidor Martínez-Almeida ha insistido en que es Más Madrid «quien ha traído el odio a la política española», y al PSOE le recrimina que «convergen con Vox en un enemigo global, el PP».
Los cuchillos han volado por el salón de plenos del Palacio de Cibeles, de todos contra todos. Porque aunque el protagonismo era el de Ortega-Smith -a quien esperaban en la puerta un orden de fieles que le aplaudieron-, los portavoces han olvidado por momentos el orden del día para lanzarse a despellejar las políticas del otro, a nivel regional, regional y franquista, en una combate de guerrillas de todos contra todos.
Para Rita Director, la portavoz de Más Madrid, el pleno no discute la acto, porque «los hechos no están en discusión, y constituyen una asalto». Cree que esto «no es la excepción a la norma; es el método que quiere usar la extrema derecha», y por eso pactar o asociarse con Vox «inhabilita», en opinión de Director. El pleno es importante para que «lo que no es ordinario, no se normalice», recuerda.
Reyes Maroto, la portavoz del PSOE y peticionaria, pegado con Más Madrid, del pleno de reprobación del concejal de Vox Javier Ortega-Smith, ha recordado que su orden ya pidió la reprobación del munícipe en noviembre por «alentar concentraciones ilegales delante la sede del PSOE en la calle Ferraz», y ha criticado que incluso se dirigió a la Policía presente en alguna de estas manifestaciones para advertirles sobre posibles excesos policiales cerca de los que protestaban.
Pero encima de las críticas a Vox y al concejal Ortega Smith en concreto, Maroto ha estudioso para despellejar al corregidor José Luis Martínez-Almeida, del que aseguró, obviando la mayoría absoluta que logró el regidor en las últimas elecciones, que «su carrera política siempre estará ligada a Vox», con quien estuvo asociado el pasado mandato en el Junta. Incluso ha mencionado la portavoz socialista el muñeco que imitaba a Pedro Sánchez en la manifestación de la calle Ferraz de Nochevieja, reprochando a Martínez-Almeida que aún no haya «condenado públicamente esos actos». Maroto ha ido un paso más allá, y encima de la reprobación de Ortega-Smith ha pedido al corregidor que Borja Fanjul no siga siendo presidente del pleno, y que le pida al PP que rompa sus pactos con Vox en otros gobiernos.
Desde el PP, la portavoz del Gobierno municipal, Inma Sanz, le ha recordado a Ortega Smith que «se pasó de frenada» en varias ocasiones, y le ha recriminado que «no asume la existencia de las urnas» e intenta cambiarla con comportamientos encaminados a seducir la atención. «Sus numeritos interiormente y fuera de este pleno son las mejores coartadas para Pedro Sánchez y la izquierda; se ha convertido en uno de sus mejores aliados».
El reprobado, Javier Ortega-Smith, ha calificado el pleno como «el de la reprobación de la hipocresía», y lo considera «una cortina de humo para tapar la infamia que ha ocurrido en Pamplona», en relato al pacto del PSOE con Bildu que les ha cubo a estos últimos la alcaldía de aquella población. Delante las críticas vertidas contra él por Martínez-Almeida, le ha reclamado que «quien no está calificado para ser corregidor es usted».
Entre sus recriminaciones por un pleno «que manda huevos», le ha recordado el cerradura de Madrid a vehículos sin calificativo, la constitución de «un orden mezclado ilegal», las promesas incumplidas en materia de vivienda o su «enredo a los vecinos en campaña, a quienes no dijo dónde iba a colocar los cantones de precisión».
Pero además ha tenido palabras a Rubiño, al que agradeció que dijo que no había habido asalto física el día de autos, «dejando con el culo al meteorismo, o mejor con los pechos al meteorismo, a su portavoz», Rita Director. A esta la ha llamado «asaltacapillas». Y ha puesto un vídeo de agresiones a Vox. Tras lo cual, ha protestado por no tener derecho a una segunda intervención tras las de el resto de grupos, y se ha marchado del pleno, pegado con sus compañeros de orden. Luego han vuelto, para la votación final de la reprobación, que PP, Más Madrid y PSOE apoyaron.
En la tribuna de invitados, la directora militar de la Número Civil, la socialista Mercedes González, y la diputada regional de Más Madrid, Carla Antonelli.