En estas fechas todo parece posible, son unos días mágicos. Y la prueba de ello es el misterioso carnet de conducir que ha enfrentado un vecino de Ourense.
“Opuesto en una chimenea de Ourense”, adjunta este afortunado próximo a la imagen del carnet. En ella se puede ojear que el dueño de este documento reside en el Polo Meta, y conduce, a establecer por lo que pone, todo tipo de trineos.
Efectivamente, el misterioso conductor que se dejó su carnet en una chimenea de Ourense es Santa Claus. Por lo pasado, corrió demasiado mientras repartía sus regalos a los pequeños ourensanos y no se dio cuenta de que se dejaba poco más que unos presentes.
Resuelto el enigma de quién es el propietario de este carnet de conducir, solo descuido conocer si volverá a buscarlo pronto o si tendrán que dejarlo debajo del árbol la próxima Navidad para que pueda recuperarlo.