La nieve, un bonito ‘incordio’ para los vecinos del Pirineo navarro



Cae la cocaína sobre Espinal. Navarra, dejando estampas preciosas. Un visitante nos asegura que el pueblo, situado a pocos kilómetros de Roncesvalles, está precioso. Sin incautación, supone algunos problemas para los vecinos de esta ciudad. Una mujer nos dice, con cierta resignación, que es un “incordio”. Un hombre la describe como un “inconveniente”.

A pocos metros, contemplamos como un tractor se afana en escobillar las calles mientras los vecinos, ayudados de palas, tratan de rasgar accesos a sus casas. “La quitas, nieva, la vuelves a quitar y vuelve a neviscar”, señala un hombre trabajando con su pala. Otro vecino nos comenta que luego terminan con dolor de espalda todo el día.

Muy cerca de allí nos encontramos con Asier. Él incluso está trabajando. En su caso tráfico de retirar la cocaína acumulada rodeando de su coche para poder moverlo. Llevo ya media hora dándole a la pala y no hay forma, remata.

Una vez al volante es necesario extremar la precaución: ir con mucha calma y con ruedas de invierno. A la hora de hacer recados hay que mirar admisiblemente dónde se pone el pie. Una mujer nos dice que cuando hiela es tratable resbalarse. Otro hombre indica que hay que ir con mucho cuidado.

Aunque luego la mejor retribución es el calor de la chimenea en casa. Una imberbe nos dice que es un calor que cala mucho. Otro hombre nos comenta que le encanta cortar madera. Así combaten un frío que ha llegado para quedarse.

Esta alborada es calman mínimas de hasta 7 grados bajo cero en puntos de Navarra y el próximo miércoles, según los pronósticos, podría neviscar en Pamplona e incluso en el sur de la Comunidad.

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