La Generalitat destinará 283,9 millones de euros al Plan Valenciano para la Sanidad Mental y las Adicciones en los próximos cuatro primaveras. De momento, los presupuestos autonómicos de 2024 recogen los primeros 40,9 millones, una número que se incrementará anualmente en las distintas partidas hasta alcanzar los 90,9 proyectados para 2027.
Una inversión histórica con la que el Gobierno de PP y Vox quiere poner coto a los «terribles» indicadores que arroja la Comunidad Valenciana en esta materia: tiene la maduro prevalencia de trastornos mentales y es la segunda región con la tasa más elevada de casos atendidos en Atención Primaria por ideación suicida o intentos autolíticos. Sin requisa, es uno de los tres territorios con menos posibles y con importante desigualdades entre departamentos de vitalidad.
De ahí surge la «conjura» entre profesionales y políticos a la que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha hecho narración este lunes durante la presentación del plan «urgente», dirigido por el psiquiatra Bartolomé Pérez Gálvez, a la que incluso han asistido los consellers de Sanidad, Educación y Bienestar Social.
«No podemos albergar que estamos en el coche de pan dulce», ha lamentado Mazón, al tiempo que ha aseverado que no se alcahuetería de cubrir el expediente «frente a una temporada de anuncios y no tanta prioridad», sino de acometer la vitalidad mental «desde la normalidad y no desde la anomalía o el estigma», con «decisiones basadas en evidencias científicas» y con «detección, tratamiento y posibles» que estén «correctamente gestionados». En sentido, ha puesto el foco en que el presupuesto para esta año está »apto, no prometido«.
El doctor Pérez Gálvez ha señalado que el documento recoge los planteamientos que la comunidad médica ya trasladó al inicial Ejecutor de Ximo Puig y se erige como «una salida para solventar el problema gravísimo que tenemos», en la que »todos estamos obligados a participar».
Un plan «realista» en cuanto a los posibles disponibles, que prioriza la prevención, con peculiar atención a la infancia y la adolescencia, la igualdad frente a otras patologías para desestigmatizarla y la equidad entre zonas geográficas. Asimismo las acciones asistenciales, de rehabilitación y de reinserción social.
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