El Gobierno investigación ya el apoyo del Partido Popular (PP) para los tres decretos que se votan este miércoles en el Congreso de los Diputados (aunque la sesión, por cuestiones logísticas, se celebrará en el Senado) tras contraer que no podrá contar con el sí de Junts per Catalunya, uno de los principales socios con los que sacó delante Pedro Sánchez su investidura el pasado noviembre. El ministro de la Presidencia y Rectitud, Félix Bolaños, ha telefoneado este lunes a la secretaria común del PP, Cuca Gamarra, posteriormente de que la semana pasada los de Carles Puigdemont confirmasen su rechazo, tal y como confirman fuentes de la dirección del PSOE. Mientras, desde el PP aseguran que ha habido más de una citación y que los contactos se han iniciado durante el fin de semana, incluido el día de Reyes.
El secretario de ordenamiento del PSOE, Santos Cerdán, ha ofrecido una rueda de prensa este lunes en la sede de Ferraz, donde no había comparecencias desde el pasado 9 de octubre, para pedir «responsabilidad» al primer partido de la examen. Mencionando a Alberto Núñez Feijóo, el número tres de los socialistas, le ha reprochado que diga que «no quiere guardar a Sánchez» ya que, ha argumentado, a quien se salva con las medidas contenidas en los decretos, entre ellas las relativas a las pensiones o al transporte sabido, es «a los ciudadanos». Cerdán ha acentuado al líder de los populares de no tener «tesina político» y de estar condicionado en su acto política por la «ultraderecha», en remisión a Vox.
Horas ayer, en una entrevista en el software La Hora de la 1, de Televisión Española, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesus Montero, ha asegurado que se sigue negociando con Junts, si acertadamente ha deslizado que su posición de rechazo a los decretos tiene una intención electoralista, pese a no deber cita con las urnas a la audiencia en Cataluña, como sí, este mismo año, en Galicia y el País Vasco. «Con Junts seguiremos hablando», ha confirmado luego Cerdán, quien la semana pasada se reunió en secreto en Barcelona con el secretario común de Junts, Jordi Turull.
El número tres de la Ejecutiva Federal del PSOE se ha permitido incluso despellejar las propuestas del PP, que ha destapado la puerta a una renuncia a cambio de que se acepten algunas de sus enmiendas en materia fiscal, las que lleva tiempo reclamando, como la deflactación de la tarifa del IRPF, la cuesta del IVA de la carne, el pescado y las conservas y una marcha detrás en la subida del mismo impuesto del valencia añadido a la luz y el gas. Para Cerdán, según ha zanjado a preguntas de la prensa, «lo que el PP pretende es menos ingresos y más gastos, que nos expliquen cómo se hace», ha sentenciado.
Dos llamadas
El PP, por su parte, ha agradecido los contactos del Gobierno para intentar guardar sus decretos, aunque no vio «mucha voluntad» en los interlocutores. Dos diferentes en los últimos dos días. «Se han producido dos llamadas de teléfono de dos personas distintas del Gobierno. Una el domingo y otra este lunes», reconocen fuentes populares, que confirman que una de esas llamadas la hizo el ministro de Rectitud, Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, a la secretaria común del PP, Cuca Gamarra.
En esa conversación, como en la ulterior, al punto que hubo intercambio de pareceres, pues el Gobierno no quiso entrar a valorar las tres exigencias puestas por el Partido Popular a cambio de la renuncia en la votación. «Podríamos estudiar la posibilidad de una renuncia a las medidas económicas del Gobierno en el supuesto de que acepten deflactar la tarifa del IRPF a los que tengan ingresos de menos de 40.000 euros, que bajen el IVA a la carne, el pescado y las conservas y que reconsideren la subida del IVA a la luz y el gas, al menos para los más desfavorecidos», ha señalado Borja Sémper, que ejerció de portavoz tras el primer Comité de Dirección del año.
Sémper ha recordado que el PP no va a «salir al rescate del señor Sánchez si se encuentra en apuros por los intereses contrapuestos de sus socios de Gobierno. Va a ser la tiempo de la angustia, porque tienen que poner en global a los que no tienen tesina para España y a los que tienen intereses en contra del país».
El PP recuerda que ni la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ni la de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quisieron reunirse con ellos para estudiar medidas a incluir en estos tres decretos leyes. «No quisieron reunirse y durar a acuerdos con el primer partido de España, pero sí aceptaban la tutela de EH Bildu, Sumar o PNV. Y esto lo vamos a ver durante toda la tiempo», ha señalado Sémper.